Damien Platt un inglés de 32 años está enfremo de cáncer que surgió por culpa de los baños solares que ha tomado durante ocho años y en los que se ha gastado más de 7.000 libras, 8.600 euros al cambio. Cuando los doctores lo descubrieron el cáncer estaba ya muy avanzado y era incurable, le dieron solamente 10 meses.
Él explicaba que "comenzó por que en aquel momento todas las personas cercanas a él se bronceaban", al final se acabó convirtiendo en una adicción y en estos años ha llegado a ir más de dos veces por semana a broncearse. Afirmaba que "no podía salir sin haberse bronceado antes" y que "'para él era su forma de ser feliz".
Damien tuvó suerte y las medicinas le hicieron efecto y después de más de diez meses sigue vivo el problema es que sabe que su cáncer ya no tiene cura y en algún momento las pastillas le dejarán de funcionar.
Según cuenta el Daily Mail ahora mismo está ayudando a una asociación a conseguir dinero para la investigación de este tipo de cáncer y utilíza su cuenta de Twitter para intentar conseguir dinero para la investigación
