HUIDA DE LA GUARDIA CIVIL
La Policía Nacional ha informado de que fueron avisados por la Guardia Civil de Pollença de que un vehículo se había dado a la fuga por la carretera de Artà y que no había podido ser interceptado por la temeraria actuación del conductor que llegó a alcanzar la velocidad de 140 kilómetros/hora en tramo urbano y realizar numerosas maniobras evasivas.
La Benemérita explicó que el vehículo había sido robado el viernes anterior en Palma y aportó los datos del vehículo informando de que el turismo se dirigía a Palma a una gran velocidad.
PERSECUCIÓN EN PALMA
Así las cosas, la Policía Nacional estableció un dispositivo para intentar localizar y detener el coche y pocos minutos después, el mismo fue visto en Son Gotleu.
Los agentes observaron que en el interior del coche había tres jóvenes y estos, al percatarse de la presencia policía, aceleraron la marcha y se dieron a la fuga.
La policía ha explicado que el conductor realizó “maniobras temerarias, llegando a circular en dirección contraria por las estrechas calles de la barriada palmesana, poniendo en grave peligro a los viandantes que se encontraban en su camino y a los agentes”.
Tras varios minutos de persecución el vehículo se detuvo en mitad de la vía y sus ocupantes se apearon del mismo para seguir la huida a la carrera.
Los tres jóvenes se separaron: dos de ellos, que resultaron ser menores de edad, fueron detenidos tras refugiarse en un portal mientras que el tercero, el único mayor de edad y de nacionalidad argelina, fue arrestado pocos minutos después.
UN MENOR AL VOLANTE
Los policías que detuvieron a los menores reconocieron a uno de ellos como el que conducía el coche durante la persecución. El otro menor iba de copiloto y el mayor de edad en el asiento trasero.
MULTITUD DE OBJETOS INCAUTADOS
La Policía Nacional también ha informado de que a los menores se les intervino diversos objetos como gafas, tarjetas identificativas a nombre de una joven y una mochila con ropa de mujer.
Los agentes consiguieron localizar al dueño del vehículo sustraído quien se personó en el lugar reconociéndolo como de su propiedad.
El coche presentaba diversos golpes y daños causados por los jóvenes y en su interior se localizó un móvil y dos baterías portátiles que el dueño no reconoció como suyos, aunque sí indicó que le faltaban 400 euros.
Así, los agentes procedieron a la detención de los tres jóvenes a quienes se les acusa de delitos de hurto de vehículo; al conductor por delito contra la seguridad vial y al mayor de edad también por resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad, ya que en el momento de su detención se resistió activamente a la acción policial, procediéndose al traslado de todos ellos hasta dependencias policiales.