Antoni Poveda vicepresiendete de movilidad de la AMB ha explicado en TV3 las intenciones que tienen el Ayuntamiento de Barcelona. Se puede decir que es un anti-plan PIVE. Ya que argumentan que hay un exceso de coches en la ciudad.
Se trata de una gran iniciativa que esta pendiente de aprobarse en Barcelona. Se pretende ir acabando con los coches que más contaminan y convertirlos en chatarra para que no contaminen más.
A cambio los propietarios que tienen coches más contaminantes podrán viajar gratis con el transporte público durante 3 años si se deshacen de su vehículo. Esta es la medida que se quiere poner en marcha en el Ayuntamiento de Barcelona, para combatir la contaminación de la ciudad.
A estos conductores recibirán la tarjeta verde, asociado a un DNI que les permitirá usar todo tipo de transporte público de la ciudad. Lo normal sería que los coches diésel fabricados antes del 2006 o los de gasolina de más de 20 años sean los sacrificados con esta medida. Esta medida parece muy interesante.
Lo que no vemos tan claro es que el propietario debe comprometerse a no comprar ningún otro vehículo. Ahora la pelota esta en el tejado de los políticos para hacer viable esta propuesta que parece que tiene día y hora para concretarse. Colau, Puigdemont, la regidora de movilidad Mercedes Vidal y más personalidades deben dar el visto bueno a la financiación. Veremos en que queda todo esto y si ha sido realmente útil.







