"Estamos casi en julio y el escenario es peor que nunca", lamenta Biel Barceló, de Agrupación Ciudadana Ciutat de s'Arenal. Ruidos continuos, inseguridad, robos, droga en plena calle, atracos disfrazados de prostitución... La tónica habitual de otros veranos que, a estas alturas, resulta ya imposible de digerir.
Por ello, anuncian un paso adelante en sus exigencias porque "ya no basta una ordenanza cívica, si es que algún día se dignan a aprobarla": La Plataforma Por una Playa de Palma Cívica pone en marcha los mecanismos para la autogestión. Así, han anunciado que van a solicitar al Pleno del Ajuntament una relación de los recursos que se destinan a Playa de Palma para decidir ellos los destinos. Infraestructuras, limpieza, seguridad... "Queremos auditar las cuentas, saber cuál es el presupuesto propio y decidir repartos, no lo que hace Cort que es tirar la toalla", ha anunciado Fernandez-Alarcón.
Según estimaciones de empresarios, la zona representa el 34 por ciento de los ingresos municipales y critican que el retorno no sea proporcional y justo. "Este Distrito sufre un grave desequilibrio respecto de las tasas y tributos aportados y la inversión pública recibida, lo que se traduce en carencias a nivel de servicios e infraestructuras, déficit que no puede permitirse un distrito como éste, toda vez que se trata de la cuna del turismo en Mallorca y un referente a nivel mundial. La fuerte inversión del sector hotelero de la zona debe venir respaldada por una inversión tanto de recursos de infraestructuras como de medios para atajar el turismo incívico", indican.
La posibilidad, destacan, está contemplada en la actual regulación: el artículo 19 del Reglamento Orgánico de los Distritos recoge la posibilidad de que éstos gestionen el porcentaje de los recursos presupuestarios, mediante una norma de carácter orgánico, y el Artículo 24.1 de la Ley Reguladora de las bases del Régimen Local apunta a la crecaión de órganos territoriales de gestión desconcentrada.
"Si no nos quieren y no nos quieren ayudar, que nos dejen organizarnos, al menos", han afirmado.
En cuanto a la ordenanza cívica de Palma que no llega a materializarse, según fuentes de Cort "por estar paralizada en los servicios jurídicos", hoteleros y vecinos exigen que "por dignidad" la aprueben.