Un total de 350 efectivos y una flota aérea compuesta por cinco helicópteros y cinco aviones formarán parte este verano del Operativo Interinsular contra Incendios Forestales (OIIF) en Baleares. Así lo ha anunciado este jueves la presidenta del Govern, Marga Prohens, en un acto celebrado en el aeropuerto de Son Bonet (Marratxí), junto al conseller de Agricultura, Pesca y Medio Natural, Joan Simonet.
Entre las novedades destacadas de la campaña de 2025, se incorpora una cámara de detección avanzada capaz de transmitir imágenes en tiempo real, tanto visuales como en infrarrojos, permitiendo un seguimiento más preciso de los focos activos. El Ibanat también ha adquirido 24 vehículos nuevos para mejorar la seguridad y eficiencia del dispositivo.
“El 90 por ciento de los incendios tienen origen humano. No podemos bajar la guardia”, ha advertido Prohens, quien ha hecho un llamamiento a la prudencia ciudadana pese a una primavera "meteorológicamente positiva", con lluvias abundantes que han reducido el número de siniestros.
MÁS PREVENCIÓN Y COLABORACIÓN
El conseller Simonet ha subrayado el esfuerzo preventivo que se intensificará este año con estos 350 efectivos. En 2024 se realizaron tareas de prevención en 412 hectáreas, y en 2025 se prevé superar las 580 hectáreas, gracias a la implicación de 222 propietarios forestales que se acogen a las ayudas del Fogaiba (3,5 millones de euros).
La campaña de incendios se extenderá hasta el 15 de octubre, con la prohibición de encender fuego a menos de 50 metros de terrenos forestales. Para quemas agrícolas cerca de zonas boscosas, se exigirá autorización administrativa.
El gerente del Ibanat, Tomeu Llabrés, ha destacado la capacidad de coordinación interinsular y la colaboración con cuerpos como Emergencias, bomberos, Policía Local y Guardia Civil, esenciales para una respuesta eficaz.
UN INICIO DE AÑO ESPERANZADOR
En lo que va de 2025, Baleares ha registrado solo 17 incendios forestales que han afectado a 0,58 hectáreas, lo que supone la mejor precampaña en dos décadas. En comparación, el mismo periodo del año pasado dejó 38 fuegos y más de 68 hectáreas quemadas.
“Tenemos un reto constante con el cambio climático y la inflamabilidad del territorio, pero con tecnología, prevención y responsabilidad ciudadana, podemos marcar la diferencia”, ha concluido Simonet.