Según ha informado en un comunicado, el objetivo principal es garantizar la seguridad vial y el buen funcionamiento de los accesos a los centros educativos de la ciudad.
En este operativo, se destinarán diariamente más de un centenar de agentes para controlar la entrada y salida de los centros educativos, facilitar una movilidad más segura y reforzar la vigilancia en las principales vías de acceso. En total, el dispositivo cubrirá 129 centros escolares y diez puntos clave de circulación.
Las unidades de la División de Seguridad Ciudadana de la Policía Local, en coordinación con la Policía Nacional, realizarán tareas de vigilancia en las inmediaciones de los centros para prevenir incidentes en los entornos escolares y garantizar el cumplimiento de las normas de tráfico.
A lo largo del curso 2025-2026 se desarrollarán campañas específicas de control de velocidad, supervisión del transporte escolar y uso obligatorio de sistemas de retención infantil.