La campaña navideña “Palma, Tot un Centre de Diversió” ha vuelto este jueves al centro del debate municipal. Esta vez no por sus luces, sino por las tensiones que han aflorado en torno a las casetas navideñas de Sa Feixina. Las patronales Afedeco y Pimeco comparecieron en el pleno del Ayuntamiento de Palma para defender la continuidad del proyecto, denunciar la “desinformación” que, aseguran, circula desde hace días y reclamar un mínimo de rigor institucional en un asunto que, según recalcan, debería ser de consenso.
“EL DIÁLOGO SIEMPRE HA SIDO NUESTRA PRIORIDAD"
La presidenta de Afedeco, Joana Manresa, ha explicado que desde que se puso en marcha la iniciativa han ofrecido información detallada y reuniones a todos los actores implicados. Una de las asociaciones vecinales, ha dicho, aceptó sentarse durante dos horas para aclarar dudas y confirmar que el proyecto era “positivo para la zona”. La otra, en cambio, rechazó todas las invitaciones y prefirió —según ha denunciado Manresa— trasladar a los medios afirmaciones “incorrectas” sobre ruido, alcohol o villancicos permanentes.
Manresa también ha expresado su sorpresa con la postura del PSIB, que no quiso reunirse antes de fijar una posición pública. “No buscábamos polémicas, sino explicar una propuesta buena para Palma”, ha lamentado. Y ha recordado que, en 26 años de campaña, “nunca habíamos encontrado tantas trabas como ahora”.
PIMECO PIDE BAJAR EL VOLUMEN POLÍTICO: "EL COMERCIO NO ES PROBLEMA"
La presidenta de Pimeco, Carolina Domingo, ha intervenido después para defender que el pequeño y mediano comercio “no puede ser utilizado como arma arrojadiza”. Ha subrayado que la campaña lleva décadas sirviendo para “dinamizar el centro de Palma y apoyar al comercio local”, y ha celebrado el impulso del nuevo mercado de Sa Feixina, que considera una pieza clave para atraer actividad y recuperar vida urbana.
Domingo ha agradecido el apoyo institucional recibido y ha criticado, con sutileza pero sin rodeos, a quienes han construido discursos “basados en interpretaciones incorrectas”. Ha recordado además que el modelo de mercadillo navideño con casetas navideñas de Sa Feixina es el estándar europeo y responde a una demanda ciudadana real, no a un capricho comercial.
UN MENSAJE FINAL: RUIDO POLÍTICO Y MÁS CIUDAD
Ambas patronales han cerrado su intervención con un llamamiento conjunto a la responsabilidad y la cooperación. Reivindican una Palma “más viva, más dinámica y más unida” y recuerdan que la campaña navideña no solo genera actividad económica, sino que contribuye a llenar calles, atraer visitantes y sostener un comercio local que —advierten— lleva años resistiendo entre cambios de hábitos, plataformas online y debates que lo superan.
Mientras continúan las discrepancias entre asociaciones vecinales, partidos y comerciantes, el mercadillo de casetas navideñas de Sa Feixina sigue esperando su estreno. Afedeco y Pimeco confían en que, pese a los retrasos, la campaña pueda inaugurarse “próximamente”. Convirtiendose en un punto de encuentro para familias, turistas y vecinos… y no un capítulo más en la bronca política de diciembre.
