Alfaro ya no es jugador del Real Mallorca. Tras varios meses de incertidumbre y de búsqueda de un equipo para el jugador andaluz, todo ello sin que se llegara a buen puerto, jugador y club han acordado rescindir el contrato que les unía.
Alfaro ha compaginado actuaciones irregulares en el terreno de juego con el protagonismo de la polémica de la gestión del club a causa de su contratación entre varios miembros del Consejo de Administración.






