La investigación se inició tras la solicitud de colaboración policial al Grupo de Delincuencia Económica y Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional en Palma, por parte de la Unidad Central de Ciberdelincuencia, Grupo II de Protección al Menor de la Comisaría General de Policía Judicial de Madrid.
Por medio del ciberpatrullaje, los agentes descubrieron que se estaba cometiendo un delito en el intercambio de archivos 'Peer to Peer', lo que permite poner en contacto a usuarios en cualquier parte del mundo y compartir entre ellos prácticamente cualquier tipo de archivo, incluyendo vídeos, imágenes, música, programas o documentos.
Tras analizar toda la información, la Policía Nacional constató la presunta autoría de un hombre, de nacionalidad española, que subía a la red archivos pedófilos y realizaba numerosas descargas de archivos de este tipo a lo largo de los últimos meses.
Los investigadores constaron al menos 32 carpetas de archivos pedófilos, aunque la mayoría habían sido eliminadas por el ciberdelincuente.
El hombre fue detenido y los agentes intervinieron su ordenador portátil y dos tarjetas de memoria.