Un año más, la esperada procesión ha contado con la participación de gente de todas las edades, incluyendo a muchos jóvenes dispuestos a prolongar una tradición documentada desde 1829.
A las 21.00 horas, la comitiva ha empezado su recorrido por todo el pueblo partiendo de la Casa de la Vila de Santa Margalida. Allí, Prohens ha sido recibida por el alcalde de Santa Margalida, Martí Àngel Torres; el presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, y por la corporación municipal.
Tras recorrer calles como Constitució, Antoni Maura, la conocida como 'placeta del Dimoni' además del carrer Major, carrer del Vent o carrer de La Salle, entre otras, la procesión ha finalizado en la Plaça de l'Esglèsia, con la trencadissa de 'gerres', en la que han formado parte una treintena de dimonis.
UN AMENO RECORRIDO
Como es habitual, el camino ha estado amenizado por las diferentes bandas de música, 'colles de pagesos' y grupos de 'xeremiers' procedentes de varias localidades de la isla.
Tampoco han faltado los 'dimonis',que por segunda vez han podido ser interpretados por mujeres. Algunos de ellos, como es costumbre, han intentado quitar alguna de las cerca de 3.000 'gerres' a los payeses para romperlos a los pies de la santa.
Este año, Marina Amer Femenias ha sido la joven del pueblo que ha encarnado a la Beata. La 'vilera', fue la afortunada en un sorteo llevado a cabo en el Auditori. Cabe recordar que, en anteriores ediciones, se celebraba en el convento de las monjas. Por otra parte, las Santes han sido Júlia Riera y Antònia Maria Juan.
POLÍTICOS DE PAYESES
La procesión, compuesta por diversas estampas que recuerdan la vida de la Beata y un total de 12 carrozas, ha estado presidida por un nutrido grupo de autoridades, entre ellos alcaldes de varios municipios.
Señalar que algunos populares -entre ellos, la jefa del ejecutivo balear, Marga Prohens, y el presidente del Consell de Llorenç Galmés- han asistido al evento vestidos de payeses, tal y como ya hicieron los dos últimos años.
