Ya han empezado por fin los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y lo noto en la testosterona que anda revolucionadísima. La ceremonia de inauguración ya fue un aperitivo de lo que están siendo las retransmisiones deportivas. Tantos cuerpos medio desnudos bailando sambas y capoeiras varias convirtieron la inauguración en la más sensual y subida de tono que se recuerda. Por si fuera poco el remate llegó con el abanderado de un país que nadie conocía hasta el momento, nada más y nada menos que Tonga que se convirtió en trendig topic mundial de manera inesperada.
Mientras escribo estas líneas estoy viendo la final de gimnasia deportiva masculina por equipos. No sé absolutamente nada sobre este deporte pero he visto la final de principio a fin y he disfrutado como pocas veces he hecho. Se me acelera el corazón cada vez que aparece el estadounidense Daniel Leyva que también es conocido por posar desnudo y al que pillaron haciendo "sexting" (enviando fotos y videos marranos por internet) y del que se sospecha que en cualquier momento saldrá del armario. Mi gran descubrimiento ha sido Arthur Nory, gimnasta brasileño que curiosamente hace poco también fue pillado teniendo cibersexo y es que los móviles y las webcams las carga el diablo.
La otra modalidad deportiva que también despierta pasiones entre el público gay son los saltos de trampolín y la natación en general por razones obvias. El saltador de trampolín más popular entre el colectivo gay es el británico Tom Daley que hace unos años salió del armario y ha anunciado que se retira tras los JJOO de Río para ser padre junto a su pareja. Ningún deportista de renombre ha hecho tanto por la normalización de la homosexualidad como Tom Daley y ha demostrado que se vive mucho mejor fuera del armario. God bless Tom!! No hay que olvidar que el nadador australiano Thorpe se retiró a la vez que hacía pública su homosexualidad.
En España tenemos al patinador Javier Raya y al waterpolista Víctor Gutiérrez que en el último año han decidido salir del armario y han demostrado que son todo un ejemplo a seguir y que no es incompatible ser deportista de élite y gay. Los Juegos Olímpicos de Brasil son los primeros juegos que se celebran en un país en el que el Matrimonio Igualitario está vigente y hay que congratularse por ello.
Ahora nos espera un mes de agosto de vivir pegados a la televisión disfrutando del deporte...y de los deportistas.



