El abogado defensor, el fiscal y la acusación particular han alcanzado un acuerdo de conformidad la mañana de este jueves antes de que se celebrara el juicio en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial.
El procesado, que se encuentra actualmente en prisión, ha reconocido la autoría de los hechos y ha aceptado una pena de cinco años y seis meses de prisión por un delito de asesinato en grado de tentativa. También se le ha impuesto una orden de alejamiento de seis años y medio.
La sentencia dictada oralmente ha tenido en cuenta en concepto de atenuante el abono de una indemnización de 18.000 euros, de una motocicleta y de un vehículo, la confesión y la intoxicación por alcohol. Por otro lado, ha mantenido los agravantes de parentesco y género.
La Fiscalía solicitaba inicialmente que fuera condenado a 14 años de prisión y al pago de una indemnización de 77.694 euros por unos hechos que se remontan a enero de 2024.
LOS HECHOS
El acusado y la víctima, según expone el fiscal en su escrito de acusación, estaban casados, tenían una hija en común y convivían en el mismo domicilio en Palma.
En mayo de 2023 la mujer le comunicó su deseo de finalizar la relación, algo que él no aceptó. Tras ello, comenzó a controlar sus amistades, salidas o llamadas de teléfono.
Ese mismo noviembre la víctima le comunicó la ruptura definitiva del matrimonio, aunque tuvieron que seguir conviviendo en el mismo domicilio. La hija de ambos se fue a vivir con otros familiares para que la mujer pudiera ocupar su dormitorio.
Así siguieron hasta que en la madrugada del 30 de enero de 2024 el procesado, aprovechando que la mujer se encontraba dormida, le golpeó en la cabeza en al menos cinco ocasiones con un martillo de hierro y un kilo de peso.
La mujer fue atendida por los servicios de emergencia y estuvo hospitalizada diez días, tiempo en el que la intervinieron quirúrgicamente y la sometieron a diferentes tratamientos médicos.








