El programa de Televisión Española ‘España Directo’ dejará de emitirse la próxima temporada, tras lo acordado en la mañana de este miércoles por el consejo de administración de RTVE de no renovar este espacio debido a su elevado coste y a sus bajas audiencias. España Directo llega a su fin después de seis años en antena. Ya no estará en las pantallas de TVE a partir de septiembre de este año, de acuerdo con prnoticias. El espacio nació en julio de 2005 en medio de las críticas de los sindicatos por incluir en su plantilla sólo a un tercio de trabajadores propios de TVE y por utilizar empleados externos para cubrir los desplazamientos fuera de Madrid, el eje del programa. El espacio producido por Mediapro fue desde su debut, la bandera de lucha de los sindicatos contra la producción externa y el fichaje de productoras ‘amigas’ de la administración de turno. En marzo de este año se produjeron los primeros cuestionamientos al espacio principalmente a su elevado coste –unos 13 millones según un informe interno de auditoría- y su escasa audiencia estancada en el 13% de share, casi tres puntos por debajo de la media de la cadena. El contrato con la Corporación obligaba a Mediapro a mantener un 18% de audiencia, algo que no se cumplió durante este año. De esta manera, en abril el Consejo de Administración de RTVE renovaba España Directo sólo por seis meses con el compromiso de la productora de incluir más recursos humanos y técnicos propios de CRTVE, incorporando además la utilización de las terrenas de Madrid, Canarias y Barcelona. Del mismo modo, se bajaba el precio de la prestación y se incluía un compromiso de reducción de costes, además de diversas cláusulas para evitar que se facturara más de lo que se emitía como venía sucediendo desde el inicio del programa. Pero no fue suficiente. El Consejo de Administración de RTVE ha aprobado este miércoles, con once votos a favor -incluido el del propio presidente de la Corporación RTVE, Alberto Oliart-, no renovar la emisión en la próxima temporada de ‘España Directo’. Esta cancelación llega en un mal momento para Mediapro, asfixiada por los malos resultados de la Sexta, la imposibilidad de Público de ganar dinero y las dificultadas para renovar sus onerosos derechos deportivos.
