Durante el casting de entrenadores que llevó a cabo personalmente Utz Claassen, Bordalás, hoy entrenador del Getafe, fue recibido en un despacho del aeropuerto de Son San Juan debido a la agenda del profesor alemán con ínfulas de magnate que se han apagado junto a su rutilante estrella cuyo falso brillo no sólo utilizó para colarse en el Mallorca, sino para engañar a no pocos periodistas, digamos informadores, y alguna parte de la afición entregada y sumisa. ¿No, Pep Roig?. Algunos medios le costaron más caros, no a él sino al club que abandonó en la más absoluta reina vendiendo sus acciones antes de que se redujera su valor nominal. Tan listo el vendedor como ingénuo el comprador.
A lo que íbamos. El técnico azulón, que fue desestimado en beneficio del Chapi Ferrer, presentaba un currículum con exitosas campañas en el Elche, el Alcorcón y el Alavés. Ha sacado a los del Coliseum Alfonso Pérez del furgón de cola para hacerle un sitio en primera clase desde la que recibe al Mallorca de Olaizola en posiciones distintas, distantes e impensables hace tres meses. A pesar de todo tiene una asignatura pendiente, entrenar en la División de Honor, derecho que seguramente figura en el contrato que le liga al club de la periferia madrileña.
Mientras Angel Sánchez se quedó en Palma para enfrentarse al Atlético Baleares con el filial, James permanece en una convocatoria a la que vuelve el denostado Salomao para cubrir la vacante del sancionado Lago Jr. También Alex Vallejo regresa a una convocatoria entre cuyos integrantes se especulan salidas. De entradas mejor no hablar demasiado porque el club no puede gastar ni los cien mil euros que cuesta el deseado Gallar, de la Cultural Leonesa. ¿Los vale?.
No es el día para hablar de estos asuntos. Baja el telón de la primera vuelta y veremos dónde y cómo se para el reloj.
