Akihiro Ienaga vivió el pasado sábado contra el Sevilla su mejor noche desde que llegó hace cuatro meses al Mallorca, con un soberbio encuentro que remató con su primer gol como rojillo, que además le convertió en el tercer japonés en la historia de la Liga en anotar un tanto. Aki ha centrado muchas de las miradas en el último mes tras la tragedia que vive su país por el terremoto de 9 grados en la escala Ritcher que sacudió el noreste de Japón y que ocasionó un devastador tsunami, con miles de muertes como resultado. Ahora, su buena actuación en el campo es la que pone el foco sobre él. El nipón marcó el primer gol del Mallorca al rematar de cabeza un precioso centro del Chori Castro, pero su papel protagonista se acentuó en el segundo tiempo, cuando tras empatar el Sevilla, concentró las acciones de más talento del equipo bermellón. El ‘14’ rojillo impresionó a la grada con un repertorio de recursos técnicos propios de un ‘superclase’, con regates y fintas que provocaron aplausos y el entusiasmo de Son Moix. La banda izquierda bermellona se convirtió en una constante amenaza para el Sevilla durante la parte final del segundo tiempo. La buena actuación de Aki, en su mejor papel en toda la temporada, habrá ayudado a que el jugador supere el delicado trance que atraviesa su país, y a sentirse más integrado en un conjunto que necesita de las habilidades como las que el japonés demostró el pasado sábado.





