El Fondo de Garantía Social (Fogasa) ha acumulado hasta julio de 2011 en Baleares un retraso del 42% en la gestión de expedientes por impago de empresas a sus trabajadores. Así, de los 3.500 casos que se han registrado en las islas en los primeros seis meses del año, cifra que engloba tanto a trabajadores como empresas, cuyos empleados no han podido cobrar por haberse declarado insolventes o en situación de concurso, 1.500 siguen a fecha de hoy pendientes de resolver. El secretario de Organización de Comisiones Obreras (CCOO) en el ministerio de Trabajo, Alberto Rosales, ha asegurado, en declaraciones a Europa Press, que esta acumulación se debe a la "escasa plantilla" que la organización posee, con la cual, el sindicato augura un "colapso" de la organización. En concreto, en Baleares la plantilla está formada por siete personas, entre abogados y personal interino o de apoyo. "No es normal que se cuente con la misma plantilla que en 2003, cuando en la actualidad el número de expedientes ha aumentado y se prevé que siga incrementándose", ha criticado Rosales. En este sentido, el Fogasa reclama un aumento de plantilla, que, de no cumplirse, tendrá como consecuencia el inicio de movilizaciones. "La escasa plantilla comporta un deterioro del servicio, de hecho, ya hay trabajadores que tardan un año en cobrar", ha lamentado Rosales. Además, en un total de doce provincias españolas la acumulación supera el 50%, lo que implica que uno de cada dos expedientes no se tramite, por lo que la carga de trabajo se ha convertido en "inabordable", según CCOO. Con todo, el Fondo de Garantía Social, que cuenta con 50 centros de trabajo en España, es un organismo administrativo adscrito al ministerio de Trabajo que gestiona los salarios o indemnizaciones a aquellos trabajadores cuya empresa se haya declarado insolvente o en situación de concurso.
