Tercera jornada de juicio

La defensa del acusado del crimen de Porto Cristo pide la eximente "por alteración psíquica"

La defensa del acusado por el crimen de Porto Cristo ha mantenido este miércoles la petición de libre absolución de su representado, si bien ha solicitado que, si resulta declarado culpable, se aplique una eximente incompleta por alteración psíquica, provocada por una depresión profunda y consumo de antidepresivos.

Así lo ha avanzado durante las conclusiones del juicio por el asesinato que tuvo lugar en un bar de la localidad mallorquina en 2014. Asimismo, la defensa del acusado pide que si no es atendida esta eximente se consideren los atenuantes de anomalía o alteración psíquica y de reparación del daño, dado que aportó una finca valorada en 220.000 euros antes del juicio.

Por su parte, la Fiscalía ha mantenido su escrito y conclusiones provisionales por lo que solicita una pena de 22 años de cárcel por asesinato y tenencia ilícita de armas.

Finalmente, la acusación particular ha mantenido todos los pronunciamientos añadiendo una solicitud de orden de alejamiento de la localidad de Porto Cristo y o a 500 metros de sus representados, los familiares de la víctima.

Los hechos tuvieron lugar el 24 de junio de 2014 en un bar de la localidad mallorquina de Porto Cristo, en el municipio de Manacor. El presunto asesino acudió al bar con un arma de fuego entre las 07.00 y las 07.40 horas, antes de que abriera al público el establecimiento, ya que la víctima estaba limpiando el local.

Según el escrito del fiscal, tras mantener una breve conversación, el hombre habría disparado contra el propietario del bar, que mantenía una relación sentimental con la esposa del acusado.

Se hallaron dos proyectiles en el cuerpo de la víctima, que murió por destrucción de centros vitales a causa de un shock hemorrágico. El juicio se ha celebrado desde este lunes con un Tribunal del Jurado en la Audiencia Provincial de Baleares.

EL ARMA, PROPIEDAD DE UN FALLECIDO

En la sesión de la mañana, los investigadores han señalado que el titular legal del arma que según los investigadores utilizó el presunto asesino había fallecido en 1997, según los datos de la Guardia Civil. Así lo ha indicado la interventora de armas de la demarcación de Manacor en su declaración durante el juicio por el asesinato de un hombre a tiros en un bar del municipio.

El titular legal del arma la compró en mayo de 1997 y murió en noviembre del mismo año. De este modo, llevaba 17 años fallecido en el momento de los hechos.

Además, desde ese año el arma figuraba oficialmente como inutilizada, si bien la investigación para esclarecer el asesinato ha podido comprobar que el arma puede realizar disparos.

Sobre esto, la interventora ha explicado que tras el fallecimiento del titular legal no tienen constancia de ningún procedimiento relacionado con este arma --como por ejemplo, una transmisión a otro titular-- y que se le perdió "totalmente" la pista.

La pérdida del rastro del arma, ha continuado, se debe, principalmente, a que las armas certificadas como inutilizadas no están obligadas a pasar revista. Las autoridades pueden solicitar revisarlas en cualquier momento, pero no es una práctica habitual porque hay muchas en Baleares.

Además, la interventora ha indicado que el arma ha sido manipulada, con el cañón cortado, y ha sugerido que se pudo cortar para deshacerse de la taponación de soldadura con la que se habría inutilizado en 1997.

Debido a esta manipulación, dado que el arma ya no tenía las medidas del fabricante, el revólver no pudo haberse comprado de forma legal en ninguna armería.

El arma, un revólver del calibre 38, fue hallada en el taller del acusado. El presunto homicida tenía una licencia de armas tipo F --armas de concurso--, pero según la testigo para tener y utilizar este revólver sería necesario una licencia tipo A --cuerpos de seguridad y militares-- o tipo B --defensa personal--. Sobre esta última clase, la interventora ha apostillado que es restrictiva y que en su demarcación hay menos de cinco personas con esta licencia.

Cabe señalar que el acusado se enfrenta a sendos delitos de asesinato y tenencia ilícita de armas. Por el primero el fiscal pide 20 años de prisión y por el segundo, dos años.

EL ACUSADO, "EMOCIONALMENTE ESTABLE"

Por otro lado, también ha declarado el médico de la prisión que atendió al acusado cuando fue ingresado. El testigo ha declarado que el hombre estaba "tranquilo" y "emocionalmente estable" y que no presentaba ninguna patología ni depresión.

También ha dicho que el acusado había acudido anteriormente a los servicios de un psiquiatra porque se sentía deprimido, pero que le recetó un tranquilizante suave y no un antidepresivo.

Los hechos tuvieron lugar el 24 de junio de 2014 en un bar de la localidad mallorquina de Porto Cristo, en el municipio de Manacor. El presunto asesino acudió al bar con un arma de fuego entre las 07.00 y las 07.40 horas, antes de que abriera al público el establecimiento, ya que la víctima estaba limpiando el local.

Según el escrito del fiscal, tras mantener una breve conversación, el hombre habría disparado contra el propietario del bar, que mantenía una relación sentimental con la esposa del acusado.

Se hallaron dos proyectiles en el cuerpo de la víctima, que murió por destrucción de centros vitales a causa de un shock hemorrágico.

Suscríbase aquí gratis a nuestro boletín diario. Síganos en X, Facebook, Instagram y TikTok.
Toda la actualidad de Mallorca en mallorcadiario.com.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Más Noticias