Le pese a quien le pese, ésta es la verdadera cola VIP de Son Sant Joan: la de los residentes. La de quienes, sí o sí, deben coger un avión si quieren visitar a un familiar o llegar a tiempo a una cuestión de trabajo en la península o extranjero. Aquí no vale carreteras ni AVE. Aquí la dependencia al avión es tan evidente como castigadora.
Por ello surge este movimiento: Son Resident, Som VIP. Os animamos a compartir la imagen en vuestros muros y a llevarla con vosotros al aeropuerto junto a vuestra tarjeta de embarque.






