La nueva fiscal general del Estado, Teresa Peramato, ha tomado posesión este jueves en un acto celebrado en el Tribunal Supremo rodeada de representantes del poder judicial, la Fiscalía y el Gobierno. Pero, más allá del protocolo institucional, la noticia que aterriza de lleno en las islas es otra. Peramato ha nombrado al fiscal superior de Baleares, Julio Cano, como nuevo fiscal jefe de la Secretaría Técnica, uno de los cargos estratégicos dentro del organigrama de la Fiscalía General.
La Secretaría Técnica es, en la práctica, el “cerebro jurídico” de la institución. El área que elabora criterios, informes, circulares, propuestas normativas y directrices de actuación para el conjunto del Ministerio Fiscal. El nombramiento de Cano lo sitúa en el núcleo duro del equipo de Peramato y lo convierte en una de las voces con mayor influencia en la orientación jurídica de la Fiscalía para los próximos años.
El nombramiento de Cano en Madrid abre también la incógnita sobre su continuidad al frente de la Fiscalía de Baleares, un cargo que no ha estado exento de turbulencias. Su designación como fiscal superior quedó anulada temporalmente por el Tribunal Supremo, que estimó un recurso del fiscal de Menores, José Díaz, al detectar un defecto en la tramitación.
Tras la revisión del caso este año, el órgano concluyó que no existía irregularidad y su nombramiento quedó definitivamente validado. Ahora, su salto a la Secretaría Técnica puede mover de nuevo las fichas del tablero fiscal en las islas y obligaría a activar el procedimiento para elegir a su sustituto.
POSESIÓN DE PERAMATO
Durante su toma de posesión, Peramato ha reivindicado la independencia del Ministerio Fiscal, la necesidad de reforzar la protección a víctimas -especialmente de violencia machista- y el compromiso con la modernización de la Justica. Su equipo, ha dicho, deberá trabajar con "rigor técnico, sensibilidad social y total autonomía".

El acto en el Tribunal Supremo, breve pero cargado de simbolismo, ha reunido a la presidenta del propio Alto Tribunal y del Consejo General del Poder Judicial, Isabel Perelló, y a numerosos magistrados, incluidos varios que formaron parte del tribunal que juzgó al ex fiscal general.
Peramato —fiscal de carrera con más de 35 años de trayectoria, experta en la lucha contra la violencia de género y especializada en la Sección Penal del alto tribunal— sucede en el cargo a Álvaro García Ortiz, quien dimitió después de ser condenado por un delito de revelación de secretos y de inhabilitación por parte del Tribunal Supremo.
Antes de este acto, la nueva fiscal general ha prometido su cargo ante el rey Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela, en una ceremonia en la que han participado altos cargos del Estado, entre ellos el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la presidenta del Congreso y el ministro de Justicia.








