En cada uno de los mal llamados pactes de progres los sendos gobiernos se han caracterizado por un afán prohibitivo con el único objetivo de controlar la actividad de la sociedad y de sus ciudadanos.
Especialmente perseguidos somos las personas que tenemos el mar como ocio y como disfrute del medio ambiente; en ese grupo estamos los aficionados a la navegación a vela o a motor, los pescadores aficionados, en definitiva cualquier persona que haciendo un gran esfuerzo económico disfruta de una embarcación, en la gran mayoría de los casos muy humilde y de pequeña eslora.
Desde el Govern, que considera a los propietarios de embarcaciones unos ricos privilegiados cuando no es así-bastaría comprobar la eslora media-, sistemáticamente se nos limitan nuestros derechos y en nombre supuestamente de la protección del medio ambiente se legisla rápido y mal, de espaldas al sector y se cometen errores inaceptables como el de proteger a Etiopía.
Todos los navegantes queremos, más que nadie, que se proteja el mar y somos, sin duda, quienes más velamos por su cuidado y evitar vertidos que contaminen el Mediterráneo; el otro día un inspector del Govern tras sancionar a una embarcación que fondeó en arena pero la cadena se posaba en alga, después de un temporal y buscando un puerto de abrigo y poder descansar unas horas, el antedicho guarda le dijo que fondease a pico; lo cual es sinónimo de garrear. Con esa preparación andamos.
Y es que ese Govern que legisla desde la ignorancia y persecución es jaleado en cada acto que priva de derechos al magnate del yate pero también al propietario de un llaut de 25 palmos por grupos proteccionistas y ecologistas.
El problema es que el mayor contaminador en nuestro pequeño país es el Govern que vierte incontroladamente toneladas de vertido a diario a través de emisarios; el Govern antes de trasladar la responsabilidad a los ciudadanos debería resolver los problemas de su casa y resolver de una vez por todas los vertidos ya que es su responsabilidad y dejarnos a la gente del mar ocuparnos de nuestros residuos que lo hacemos muy bien. En cualquier caso animo a los grupos ecologistas que jalean y apoyan al Govern que se manifiesten ante la Conselleria de Medi Ambient para que cesen los vertidos; asimismo animo a la Fiscalía de Medio Ambiente que tome cartas en el asunto y abra las correspondientes diligencias, caiga quien caiga. Mis mejores deseos a los navegantes que disfruten del poco mar que nos deja el Govern, que tengáis buena proa. Que pasen un buen día.





