La Guardia Civil le ha asestado un golpe histórico a los productos falsificados al desmantelar la principal red de distribución de Baleares. Se trata del golpe más duro contra el mercado ilegal de falsificaciones en las Islas. Los agentes han localizado los productos en una nave industrial de Palma y en tres establecimientos de Palmanova, donde operaba el distribuidor mayorista que nutría a numerosos puntos de venta en el archipiélago.
ARTÍCULOS DE LUJO, JUGUETES Y PUNTEROS LÁSER
Durante los registros, realizados el pasado 28 de julio con el apoyo de peritos judiciales desplazados desde la Península, la Guardia Civil incautó:
- 23.867 bolsos y complementos de marcas de lujo, valorados en 11,1 millones de euros.
- Joyas falsificadas por un valor estimado de 368.000 euros.
- 235.000 juguetes ilegales, sin cumplir la normativa de seguridad, valorados en 1,17 millones de euros.
- 1.200 punteros láser de gran alcance, cuya venta está prohibida por suponer un riesgo grave para la seguridad pública.
Los juguetes intervenidos representan un riesgo directo para la salud infantil, ya que contienen piezas pequeñas o sustancias tóxicas que podrían provocar asfixia o lesiones graves.
UN FRAUDE DIFÍCIL DE DETECTAR
La red trabajaba con productos de procedencia china, introducidos en Baleares a través de contenedores marítimos. El nivel de falsificación alcanzado era tan alto que muchos artículos imitaban con exactitud el embalaje original, lo que dificultaba su detección incluso para expertos y multiplicaba su capacidad de engaño al consumidor.
MÁS DE 80 PERSONAS IMPLICADAS
Hasta ahora, la operación ha identificado a más de 80 personas relacionadas con la red, de las cuales siete han sido investigadas en esta última fase como presuntas autoras de delitos de pertenencia a organización criminal y contra la propiedad industrial.
Esta fase de la Operación Bubu está conectada con la previa Operación “Rats Efake”, que permitió intervenir un taller clandestino valorado en más de 4 millones de euros, equipado con maquinaria de impresión de alta gama para producir falsificaciones de marcas de lujo.
La investigación sigue abierta, y no se descartan nuevas detenciones conforme avance el análisis de la ingente cantidad de material intervenido. La Guardia Civil ha contado con la colaboración de los representantes legales de las marcas afectadas, cuyas denuncias fueron clave para iniciar el procedimiento.