El Teatre Principal de Maó acogió en la tarde-noche del pasado domingo a tres voces de lujo, y por una buena causa. El célebre barítono de Ciutadella Joan Pons y el tenor mahonés Carlos Llabrés, participaron junto al bajo-barítono Carlos Chausson, en un concierto benéfico organizado por el Rotary Club Menorca, los beneficios del cual serán destinados al proyecto de reforma de la casa de colonias de Sant Joan des Vergers.
La veladao comenzó con la intervención de José Antonio Fayas, presidente del Rotary Club, quien afirmó que los principios de su organización priorizan la colaboración para la mejora de la sociedad en cualquiera de sus aspectos, por lo que cuando oyó hablar de un proyecto tan "interesante" como el de Sant Joan des Vergers, "decidió que la mejor forma de apoyarlo era a través de un concierto benéfico". Fayas habló en primer lugar con Joan Pons, que se encargó de contactar con el resto de voces y músicos acompañantes para dar forma al espectáculo.
La veteranía de Joan Pons y las tablas sobre el escenario de Carlos Chausson hicieron las delicias de un público entrega desde el primer momento.
La coral Canticus, de Alaior, abrió la ceremonia con la interpretación de 6 piezas de Deseado Mercadal, Ortega Monasterio y Antoni Parera, entre otros.
El joven tenor Carlos Llabrés sorprendió con un repertorio de los complicados. No se amilanó el de Mahón ante arias como el "Celeste Aida" o el "In Fernem Land" de Lohengrin, piezas que requieren del poderío propio de un tenor dramático y que Llabrés solventó con solvencia.
Chauson, hizo las delicias del público con el aria "La Vendetta" de Las bodas de Fígaro, de Mozart. El bajo zaragozano demostró todo su poderío vocal en una función divertida y distendida.
La aterciopelada voz de Joan Pons puso el broche de oro a una velada entrañable que, además, tuvo fines benéficos.
Además de los tres vocalistas, participaron al piano Ulyana Popovych, Orest Lemekh i Justine Verdier, quien interpretó varias piezas en solitario.
