Veo que media isla está escandalizada ante la posibilidad de que cien toneladas de basura de Nápoles pueda ser incinerada en Mallorca. No es para tanto. Si llegase la basura, nadie se enteraría. Cada día circulan decenas de camiones con residuos por las carreteras de la isla y no es ningún drama. Si además la basura napolitana supondría no tener que subir la tasa de incineración, que la traigan, la quemamos y los mallorquines se ahorrarán un buen puñado de euros en unos tiempos que no son precisamente para rechazar negocios de esta naturaleza. Que no se escandalicen tanto y piensen que ni oleremos la basura, ni la depositarán en nuestras calles, y que además no nos subirán las tasas.





