Por culpa de los controladores aéreos no pude estar en el concierto de Lady Gaga en Barcelona. Ustedes verán: no puedo estar sin una dosis diaria de cultura, por lo que, al no poder asistir personalmente, leí con fruición todo lo que dijo esta auténtica pensadora de la modernidad, esta mezcla de Kant y Aristóteles, esta artista de las ideas. Entre las frases que me perdí de oír personalmente pero, gracias a Dios, pude recuperar en los medios de comunicación, están estas maravillas: “Odio la verdad. Prefiero una dosis grande de mierda antes que la verdad”. Leedlo dos, diez, mil veces, reflexionad y sacad toda la profundidad que encierran estos pensamientos. En otro momento dijo que “Ya habréis oído que tengo una polla gorda italiana. Venga ¡ahora sacaos las vuestras!”. Impresionante. Tan joven y capaz de albergar conceptos tan sutiles y profundos. Y pensar que yo, por culpa de los puñeteros controladores aéreos me tuve que quedar en Mallorca leyendo Los Miserables de Víctor Hugo. Por Dios, la cultura aquí al lado y yo perdiendo mi tiempo con libros caducos. No tengo constancia, pero supongo que las autoridades habrán creado una línea de subvenciones públicas para una artista de esta profundidad, con este arte. Menos mal que los medios de comunicación nos ponen al día. Menos mal que la gente salió feliz de haber pagado la entrada para escuchar este arte, esta creatividad. Menos mal que Cataluña sí tiene el nivel de reconocer a este genio viviente, a este monstruo intelectual. Qué maravilla. Si un día pudiéramos tener en el gobierno a un político con esta claridad de ideas... Por favor, si alguien tiene el vídeo completo de la actuación, no dude en llamarme que lo quiero ver junto con mi suegra.
