El Govern de las Illes Balears, presidido por Marga Prohens, ha adjudicado el V Plan de Fosas por un importe de 837.000 euros, dividido en dos lotes: 759 620 euros para las labores de excavación, exhumación e identificación en doce fosas de la Guerra Civil, y 77.343 euros destinados a la restauración, conservación y documentación del material recuperado.
Estas actuaciones proyectadas para los próximos 24 meses representan una firme continuación de la labor emprendida en planes anteriores, que ha permitido devolver dignidad a víctimas y consuelo a sus familiares.
Este impulso institucional no puede entenderse como una decisión política vacía o circunstancial. El Plan de Fosas ha demostrado ser un instrumento de justicia histórica y memoria colectiva que trasciende a los partidos, porque encarna valores compartidos: reparación, verdad y reconciliación. Ese carácter transversal debe ser preservado: esta tarea no puede ser reivindicada como bandera de ningún espacio político, por legítimo que sea su protagonismo en su implementación.
El Plan de Fosas ha demostrado ser un instrumento de justicia histórica y memoria colectiva que trasciende a los partidos, porque encarna valores compartidos: reparación, verdad y reconciliación
El compromiso del Ejecutivo autonómico actual es coherente con los valores democráticos y con el deber de atender a las generaciones pasadas. Continuar abriendo fosas, identificando restos humanos en la medida de lo posible, según la ciencia forense, e informando a las familias constituye un acto de responsabilidad moral y un deber institucional.
La sociedad balear ha respaldado estos planes. Se impone mantener ese consenso social y político para dar continuidad a una tarea tan sensible como necesaria.
Este V Plan de Fosas demuestra que la memoria democrática no es patrimonio de nadie, sino una obligación de todos. Es así como se logra avanzar para superar viejas y dolorosas heridas, como una sociedad madura, capaz de honrar su pasado con rigor, dignidad y respeto.
