La célebre frase que con los periódicos de hoy se envuelven los bocadillos de mañana, que la verdad, no sé a quién atribuir, se ha cumplido cuando iba a escribir esta columna; tenía previsto tratar un tema absolutamente menor y mucho más liviano como son los Presidentes Bauzá y Armengol cuando ha saltado la noticia de que se ha condenado al President Mas por el sainete del 9-N, que, entre otras cosas, me pareció una falta de respeto al pueblo catalán.
Los catalanes si quieren obtener la independencia, haciendo uso de su legendario “seny” deben plantearlo como algo serio, no como la charlotada que montaron el President Mas y compañía, haciendo votar en urnas de cartón a sus ciudadanos como si estuviesen eligiendo un delegado de clase... fue una propuesta que no estuvo a la altura de ese pueblo.
Cataluña no es el President Mas y mucho menos el President Pujol, es mucho más, es un pueblo con una bandera, una cultura, unas tradiciones y una lengua que ha perdurado en el tiempo y que para exigir respeto las tienen que respetar ellos mismos. Artur Mas, en mi opinión, no ha respetado a los catalanes, ni a los independentistas a los que ilusionó con un estado propio ni a los contrarios a la independencia a los que crispó. El President Mas ha sido un irresponsable.
Los líderes catalanes, si de verdad, creen en la independencia deben plantear un proyecto de independencia ajustado a la Ley y luchar, si es necesario, para modificar la Ley (cualquiera que sea) y hacer valer el derecho a decidir, que no es más que una autodeterminación, ante los Tribunales internacionales y organismos internacionales competentes, no sembrando los institutos de urnas de papel como en una ópera bufa.
Una vez más falta a la verdad el President Mas cuando dice que le han condenado por su forma de pensar; no es cierto, le han condenado por infringir la Ley; si no era capaz de interpretar el mandato del Tribunal Constitucional la Generalitat tenía y tiene unos servicios jurídicos muy eficaces que le podrían haber explicado, que el artículo 6 del Código Civil (una Ley vigente desde 1889) que la ignorancia de la Ley no excusa su cumplimiento. Que pasen un buen día.
