Puede resultar escatológico pero es una verdad como un templo: desde que existen los teléfonos móviles inteligentes, nosotros somos cada vez más tontos y hacemos cosas tan tontas como pasarnos horas en el baño mirando internet, concretamente Facebook. "Algo" que podría ventilarse en unos minutillos terminan siendo horas. El Wi-Fi, el cargador y la redes sociales son el peor amigo del hombre en el baño.





