“Dale un carguito y verás quien es fulanito”, dice el refrán. Dáselo a alguien mediocre y con espíritu de funcionario (en el sentido peyorativo de la palabra, asociable a burocracia, papeleo, concentración en el trámite y no en el objetivo) y saldrá la reglamentación comercial que tiene Baleares, esperpéntica. La conselleria del área, que ahora me doy cuenta de que existe, presentó estos días un reglamento muy propio de sus autores: prohíbe a los comercios abrir muchos días al año y, desde ahora, también les prohíbe cerrar otros días. Suponemos que en breve harán un programa informático que calcule exactamente cuándo deberán abrir, cuándo cerrar y cuándo poner la barrera por la mitad. La nueva norma repite que no pueden abrir los días festivos, excepto unos pocos determinados anualmente; pero, además, desde ahora les obliga a abrir en festivo -obligatorio, bajo pena de sanción, que para eso tenemos el carguito- cuando por ejemplo se acumulen tres festivos consecutivos. Nuestros fulanitos ya habían regulado las rebajas (era un carguito del PP el que se metió en este lío) pero ahora regulamos las no rebajas. O sea, fuera del periodo de rebajas, el comercio no podrá bajar sus precios o hacer promociones en más del 25 por ciento de los productos, si es una gran superficie, o del 50 por ciento si es un comercio pequeño. Y yo pregunto: ¿algún funcionario va a ir a El Corte Inglés, Carrefour o Alcampo y se va a poner a sumar el número total de ítems en venta y sobre ellos va a calcular si los rebajados son más o menos del 25 por ciento? ¿Pero cabe esta idea en la mollera de alguien? Sí, por lo que se ve, de nuestros carguitos. Consellera: siento informarle que yo cada fin de semana hago compras. Y de noche. Y de madrugada. Que no tengo ni un día de descanso al año, salvo cuando la Visa queda exhausta. Y sin salir de Mallorca. Aquí. Y le digo consellera, para que informe a sus fulanitos que salgan raudamente: a mí me hacen descuentos importantes y cualquier día. Hace poco incluso compré con recortes de precios del ochenta por ciento, pese a que no estamos en rebajas. ¿Consellera, no ha pensado en prohibir a amazon.com vender para Baleares en domingo? ¿O impedir que elcorteingles.com trabaje en festivo? ¿Y si le ponemos una sanción a la fnac.es por vender de madrugada? Anda, ¿y a qué precios venden? Es que estos de lacasadellibro.es hacen descuentos sin consultar a nuestros fulanitos. Consellera: yo compro en Internet. Y usted, distraída, aún no ha hecho una norma para que sus fulanitos salgan con la libreta de sanciones, con tres copias y varios sellos de goma, a perseguirlos. Yo, si fuera usted, haría que mis carguitos subieran a los postes de teléfonos con sus escuchas y operación comercial que viera, zas, multa. O si quiere, ponga a sus carguitos en Correos, a buscar paquetes comprados por Internet. Porque esto es comercio ¿no? Y usted es consellera de Comercio, ¿no? Uy, consellera, esto no lo podemos permitir. Hay que coger el Boletín y sancionar. Y mandar a los inspectores a controlar. ¡¡¡Habráse visto!!! Consellera: aterrice. O usted deja a los comerciantes en paz o su siguiente trabajo va a ser ir a su funeral masivo.
