Los vecinos del Pont d'Inca Nou no pueden más. Desde hace una semana una serie de chalés de Marratxí están siendo okupados y los residentes han decidido organizarse para iniciar todas las acciones que estén en su mano para poner solución al problema "ante la total pasividad de Ajuntament y Policía Local y Guardia Civil", aseguran a mallorcadiario.com.
Los vecinos se han reunido esta misma mañana y se han comenzado a recoger firmas ante la problemática de la okupación por parte de miembros de étnia gitana de al menos cinco chalés de la zona. "Algunas de esta viviendas son del banco y otras de particulares, aunque necesitamos recabar más información", indican a este digital desde la asociación vecinal.
Desde la asociación de vecinos se informa a mallorcadiario.com de la "total pasividad" de las instituciones, con lo que han iniciado una recogida de firmas y preparan la redacción de dos denuncias, una para entregarla al consistorio y otra para la Guardia Civil, y esperan que, de esta forma, se ponga punto final al malestar y el incivismo que sufren desde la okupación de las viviendas.
En la reunión mantenida esta mañana, han acordado además presionar por redes sociales y mediante escritos a la administración para intentar que se solucione la problemática.
"Hay políticos que parece que les hace gracia el tema de la okupación", informan desde la asociación de vecinos y denuncian la desprotección a la que están sometidos por parte de instituciones y fuerzas de seguridad. "Llamamos a la Policía y a la Guardia Civil y no nos hacen caso, mientras, los okupas continúan en las casas con loa problemas que ello conlleva", aseguran.
Comprenden que "no es fácil echar a esta gente de las casas, ya que la ley no lo permite" pero reclama "alguna solución o medida de penalización" para que se desbloquee esta situación.
Aseguran que , aunque se les corte la luz y el agua, "ellos la vuelven a conectar y así no se puede hacer nada". Además, también están preocupados por los niños pequeños que habitan en estas casas okupas. "Hay peleas a las dos de la madrugada y los niños no paran de llorar. No sabemos hasta que punto Serveis Socials debería hacerse cargo de estos niños, ya que no sabemos si ni siquiera están escolarizados y creemos que están sufriendo".
Por todo ello, han decidido movilizarse y organizarse para recoger el mayor número de firmas "y entregarlas a las intituciones para poner fina esta pesadilla".