La acción se ha llevado a cabo en Madrid, en un acto simbólico organizado por la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA), que ha reunido a cerca de medio centenar de representantes autonómicos, todos vestidos con batas blancas y portando cajas llenas de rúbricas. Entre ellos, el presidente de Simebal, Miguel Lázaro, ha tenido un papel destacado.
LÁZARO PIDE "RESPETO" PARA EL COLECTIVO SANITARIO
"Esto no va solo de mejoras, va de respeto a una profesión que sostiene el sistema sanitario a costa de un alto nivel de sacrificio", ha reivindicado Lázaro, quien ha celebrado el elevado nivel de participación en Baleares. En solo dos semanas, Simebal ha recogido firmas de más de la mitad de los 3.500 médicos y facultativos que trabajan en la sanidad pública del archipiélago.

"El mensaje es claro: el colectivo está harto y no va a aceptar que se legisle de espaldas a su realidad", ha señalado el presidente del sindicato. Desde Simebal insisten en que la propuesta del Ministerio no reconoce la formación, la responsabilidad ni la carga asistencial que implica la labor médica, y alertan de un "retroceso" en derechos laborales y profesionales.
MÁS 40.000 FIRMAS EN TODA ESPAÑA
La entrega de firmas —más de 40.000 en total en todo el Estado— ha coincidido con la tercera reunión entre el Comité de Huelga y el Ministerio, que se ha comprometido a presentar un nuevo borrador con "mejoras sustanciales" este miércoles, 21 de mayo. No obstante, Simebal mantiene la convocatoria de huelga para el próximo 23 de mayo, a la espera de avances significativos.
La recogida de apoyos no se ha limitado a los centros de salud y hospitales: la campaña ha sumado también más de 9.300 firmas digitales a través de la plataforma Change.org, lo que refuerza la dimensión nacional de la protesta.
RECLAMAN REGULACIÓN JUSTA
Simebal insiste en que no pide "privilegios", sino una regulación justa y adaptada a la complejidad del trabajo médico. "Las cifras de Baleares demuestran que aquí no se trata de una queja puntual: hay un malestar profundo que no desaparecerá si no hay un cambio de rumbo", ha concluido Lázaro.