Los primeros en participar en los Campeonatos de España serán los competidores de Muaythai de Baleares, así como los de Kickboxing de la categoría senior y el único representante por el archipiélago de Kickboxing adaptado, Óscar Fernández. Son un total de 32 personas que se verán cara a cara con sus rivales del 30 de mayo al 2 de junio en Guadalajara.
Ya en julio, entre los días 14 y 17 de ese mes, les tocará el turno a los 50 participantes que, salvo algún problema de última hora, representarán a Baleares en las categorías infantil, cadete y junior de Kickboxing en la capital alcarreña.
Según explica a mallorcadiario.com el director general de la Federación Balear de Kickboxing y Muaythai, Mario Segovia, el trabajo que tienen que hacer todos estos deportistas "es en gran parte mental, no solo físico. Al final, para animales racionales como nosotros, subir a un ring a pegarse es sinónimo de miedo, estrés y ansiedad, y eso se tiene que gestionar y trabajar", asegura Segovia. Por ello, "en muchas ocasiones, es mejor quien llega preparado mentalmente que quien tiene más aguante físico, aunque lo ideal es una mezcla de todo".
KICKBOXING Y MUAYTHAI EN EL ARCHIPIÉLAGO
El número de deportistas de Kickboxing y Muaythai en Baleares ha crecido de forma significativa en los últimos años. Así, según explica Mario Segovia, en este momento la Federación que agrupa a ambos deportes cuenta con 785 federados. De ellas, entre 100 y 120 corresponden a deportistas que van al Club de Lucha Agelai de Santanyí, que organizó junto a la Federación el reciente Campeonato de Baleares. Otras 200 corresponden a Ibiza, isla que alberga la sede de la Federación y en la que reside el propio Segovia.
"No podemos compararnos por ejemplo con Andalucía, que maneja unas 2.600 licencias, pero aún así, este año de Baleares salieron tres bronces en el último Campeonato de Europa", subraya.
El representante de la federación recuerda que existen diversas modalidades de Kickboxing, pero éstas se practican bien en tatami (tatami sport) o en ring (ring sport). "En España la gran diferencia entre ambas es la edad, ya que el ring sport no se puede practicar hasta los 17 años, aunque hay adultos que eligen hacer solo tatami", señala Segovia.
Por su parte, los deportistas que se inclinan por el Muaythai son fácilmente distinguibles por el tocado que llevan en la cabeza cuando suben al ring, denominado mongkon. Además, antes del combate realizan un breve ritual y durante el mismo puede escucharse una música de marcado carácter oriental.
Tanto el Kickboxing como el Muaythai son deportes muy exigentes por lo que, según subraya Mario Segovia, "lo más importante es llevar una buena dieta, estar dentro del peso y tener una buena capacidad y resistencia física, porque tienes que estar a buen nivel en todos los asaltos. En algunos combates el ganador se define por un solo golpe, algunos tanteos quedan con un solo punto de diferencia, a veces lo determina que uno baje los brazos durante dos segundos", apunta.
UN BUEN PAPEL NO ES SINÓNIMO DE GANAR
Por ello, los seleccionadores de Baleares de ambos deportes (David Serra, Javier Domínguez en Kickboxing, Arturo Fernández en Muaythai, y Bernardo Ochoa en ambos) "tienen que elegir no solo quien ha ganado aquí, sino quien puede hacer un buen papel allí". Y es que en estos deportes de contacto no se habla solo de la posición en la que quedan, sino que los seleccionadores deben asegurarse de que los competidores no se enfrentan a alguien de un nivel muy superior. "Al final te juegas ganar o perder con golpes", recuerda Mario Segovia.
En todo caso, Segovia subraya que tanto el Kickboxing como el Muaythai son deportes "muy nobles" y apuestan por la educación en valores. "En los clubes la idea es que el entrenador sea un ejemplo", asegura.
"Estos deportes están en la cultura de las artes marciales, porque son buenos para modelar emociones. Además hacen una labor social, se nota que hay algunos chicos que vienen como escapatoria a una situación complicada que tienen en casa", concluye Mario Segovia.