La barriada de Pere Garau fue denominada así en reconocimiento al ingeniero de caminos, canales y puertos mallorquín que diseñó el trazado viario del Tren de Sóller. Situada entre dos de las principales arterias circulatorias de la ciudad —la calle Manacor y la calle Aragó—, esta barriada del Eixample nació a principios del siglo XX, en lo que antiguamente eran unos terrenos de cultivo.
Todos estos datos y otros igualmente interesantes están recogidos en el libro Pere Garau, un barri amb història, editado por ARCA con la colaboración del Ajuntament de Palma, cuyas autoras son Àngels Fermoselle y Concha Gallego. La primera es la propietaria de la herboristería 'Integral', en la calle Pere Llobera, y también es hoy, además, vicepresidenta de ARCA. "Llevo 45 años en esta tienda y he vivido en primera línea todos los cambios que ha experimentado la barriada", explica Fermoselle a mallorcadiario.com.

"Lo que ha cambiado sobre todo es que ahora hay más población y que esta es en parte diferente a la que había años atrás", recalca. Muchos de los clientes actuales de su negocio son, por ejemplo, originarios de América Latina. Cabe recordar, en este sentido, que Pere Garau es hoy el barrio más poblado de Palma, con unos 32.000 habitantes sobre un total de algo más de 400.000 residentes empadronados en la ciudad. Además, es una de las zonas con mayor multiculturalidad, con relevantes comunidades de origen subsahariano, hispanoamericano, árabe y chino. Esa es, sin duda, una de las razones por las que desde hace ya varios años el Año Nuevo Chino se celebra cada mes de febrero en este barrio.
PROYECTO PRIORITARIO
En relación al estado actual de Pere Garau, Fermoselle lamenta "la falta de inversiones efectivas en la barriada" en los últimos años, a diferencia de lo que habría ocurrido en otros enclaves palmesanos. Precisamente, uno de los objetivos del nuevo equipo de gobierno municipal es el de dotar de más equipamientos públicos a esta zona. En este contexto, el alcalde de Palma, el popular Jaime Martínez, visitó el pasado martes las dependencias del antiguo Metropolitan Palace, recientemente adquirido por el consistorio junto con dos locales anexos y que será reconvertido en un centro multiservicios.
El propósito de la visita del primer edil era conocer in situ las condiciones del citado edificio, que una vez remodelado incluirá una nueva unidad básica de salud, una escoleta municipal, un espacio para la asociación de la tercera edad y un aparcamiento. Además, también se contempla la reubicación de varios servicios municipales actualmente en régimen de alquiler, como el Casal de Barri de Pere Garau, la Biblioteca Encarnación Viñas y la Oficina de Atención a la Ciudadanía. Martínez confirmó que se convocará un concurso de ideas para elegir el proyecto y que prevé que a finales de 2026 puedan empezar ya las obras.

El Metropolitan Palace, ubicado en la calle Gabriel Llabrés, fue inaugurado en 1966 y contó en su momento con la pantalla más grande de Mallorca, un lienzo sobre el que se proyectaron películas hoy míticas como Jesucristo Superstar, Tiburón, El cielo puede esperar, Mujeres al borde de un ataque de nervios, Forrest Gump o Titanic. El Metropolitan pasó a ser un multicines en 1988 y cerró sus puertas de manera definitiva en 2011. La barriada contó durante décadas con otras tres salas cinematográficas, el Fantasio, el Hispania y los Multicines Chaplin, que tristemente también acabaron desapareciendo.
EDIFICIOS HISTÓRICOS
Muy cerca del Metropolitan aún se encuentra, por fortuna, una de las pequeñas joyas arquitectónicas de Pere Garau, el bloque de viviendas denominado Ses Cent Cases, unas casas delimitadas por las calles Arquebisbe Aspàreg, Adrià Ferrà y Bartomeu Torres que fueron construidas entre 1925 y 1934 por la cooperativa La Redención del Hogar. Estas cien edificaciones —ciento dos en realidad— fueron concebidas en módulos de cuatro viviendas, dos en la planta baja y dos en el primer piso, que se han mantenido prácticamente intactas desde su creación. "Es una maravilla que estas casas, construidas para gente humilde y trabajadora, se hayan conservado", valora Fermoselle.

Un hecho quizás poco conocido es que Pere Garau contó con una de las primeras clínicas privadas que hubo en Mallorca, la Clínica Valdés, creada por el doctor Francisco Valdés Guzmán. El arquitecto que la construyó fue Gaspar Bennazar. Este centro sanitario, situado en la calle Isidoro Antillón, estuvo en funcionamiento entre 1924 y 1965. A partir de los años setenta, el edificio pasó a albergar un almacén de Tabacalera, siendo puesto a la venta en 2000, con la intención inicial de proceder a su demolición. Pero, por suerte, el aparejador Héctor Fernández rehabilitó todo el inmueble, creando cinco viviendas, manteniendo la fachada y reutilizando el embaldosado interior y una parte del mobiliario originario.
El espacio más popular de esta barriada es, no haría falta decirlo, el Mercat Municipal de Pere Garau, que se inauguró como plaza de abastos en 1943 y que ha experimentado diversas reformas desde entonces. La actual presidenta del mercado es Paquita Bonnín, quien regenta una carnicería en el interior. "En los puestos que se vacían nos solicitan últimamente poder poner actividad de bar, pero nosotros tenemos muy claro que queremos que este mercado siga siendo un mercado tradicional y que la gente venga aquí a comprar, no a desayunar ni a almorzar, por lo que no queremos dar más permisos de restauración", expone.
EL EJE DEL BARRIO
La junta directiva que preside Bonnín desde hace dos años ha llevado a cabo diversas campañas "revitalizadoras del mercado" y novedosas actuaciones para "intentar llegar a la gente joven, que es la que ha de venir a comprar a Pere Garau en el futuro". Una de esas actuaciones ha sido la reciente instalación de unas taquillas refrigeradas al lado de una de las entradas, que permiten que un cliente del mercado pueda ir a recoger su compra hasta las siete de la tarde. "Ahora mismo estamos notando un flujo mucho más importante de gente joven", enfatiza.
Justo enfrente del mercado se encuentra 'Eléctrica J. López', que abrió sus puertas en 1978. "Mi padre puso en marcha este negocio, que ahora regento yo desde hace tres años", explica José López a este digital. Este joven de nacionalidad española, que tiene 37 años y que estudió Electricidad, conoce también muy bien la barriada. "Nuestros clientes más fieles son los de toda la vida", reconoce, para añadir: "De hecho, apenas tenemos clientes jóvenes". Esta última circunstancia podría acabar dificultando, con el tiempo, la posible continuidad futura de comercios de este tipo en toda la zona.

Hablando ya más en general, López indica que "a lo mejor hace veinte años no había aquí tanta gente extranjera". Esta percepción es correcta en lo esencial, tal como recoge el citado libro Pere Garau, un barri amb història, que detalla que Pere Garau ha vivido desde su creación tres oleadas migratorias. La primera tuvo lugar a partir de la segunda década del siglo pasado y fue protagonizada por familias provenientes de toda Mallorca. La segunda ola se desarrolló a partir de los años sesenta, con la llegada de muchas personas procedentes de la Península a raíz del boom turístico. Y la tercera y última ola cabe situarla ya a principios del siglo XXI, con inmigrantes procedentes en su mayoría de países desfavorecidos económicamente.
ACTUACIÓN MUNICIPAL
En este contexto, a lo largo del último cuarto de siglo los sucesivos equipos de gobierno de Cort han intentado fomentar políticas de integración social y cultural, con resultados no siempre satisfactorios. A partir de esa evidencia, los actuales responsables municipales quieren potenciar el uso de espacios vertebradores de la convivencia como el Casal de Barri y contribuir también a la dinamización comercial de la zona. Asimismo, se quiere dar más peso y relevancia a la figura del coordinador municipal. En el caso del distrito de Llevant, del que forma parte Pere Garau, su coordinador es José Luis Haro, quien depende jerárquicamente de la regidora Lourdes Roca.

"Mi día a día consiste esencialmente en atender cualquier sugerencia, queja o propuesta que provenga de los ciudadanos y de las asociaciones vecinales", sintetiza Haro, quien por ello mismo está "más en la calle que en el despacho". Su equipo coordina "todas las acciones que sean pertinentes" desde la Oficina del Districte de Llevant, instalada en Son Gotleu, en la calle José de Diego. "Todavía hay muchos ciudadanos que no conocen la existencia de las oficinas de distrito, que son un referente muy importante, pues se solucionan muchas cosas a través de ellas", añade Haro. La atención a la ciudadanía es así "más directa" y, además, "se agiliza todo".
Cuando un ciudadano se pone en contacto con su oficina, este coordinador se desplaza a menudo hasta el lugar en donde ha sido detectada una problemática o una incidencia determinada, para intentar resolverla lo antes posible. Haro corrobora que la mejora de la limpieza y la lucha contra el incivismo están siendo dos de los caballos de batalla de Cort en Pere Garau. A modo de ejemplo, recuerda que "tras haber escuchado las peticiones de los vecinos de la Plaça de les Columnes en materia de seguridad, esta plaza cuenta ahora con una presencia diaria permanente de la Policía Local desde las diez de la mañana hasta las dos de la madrugada". Dicha plaza, que es una de las más populares de Ciutat, fue construida en 1934 siguiendo las directrices originarias del arquitecto Guillem Forteza.
PRESENTE Y FUTURO
Los amantes de la historia de Pere Garau disponen desde hace dos años de un nuevo libro específico sobre la barriada, Pere Garau. Biografia d'un barri (Ínsula Literària), coescrito por Cristina Llorente y Magdalena González, que es una obra igualmente esencial para conocer aún mejor el ayer y el hoy de dicho barrio.
Desde el ámbito estricto de la sociedad civil, cabe reseñar la labor que ha estado llevando a cabo la entidad Flipau amb Pere Garau desde el momento mismo de su nacimiento, hace ya una década. A lo largo de todo este tiempo, dicha entidad ha ido presentando diversas propuestas para que esta barriada pueda contar de forma progresiva con más equipamientos y también para que haya mejoras en el ámbito de la convivencia.
Un ejemplo muy reciente y significativo del "flipe" positivo que está generando Pere Garau en personas hasta hace poco ajenas al barrio lo encontramos en la calle Isidoro Antillón, en donde desde hace sólo tres meses funciona la galería 'Curt Art Studio 58', que ocupa la nave en donde antes había un taller de coches. "Este barrio está cambiando y mejorando poco a poco, por ejemplo con la paulatina llegada de hipsters y de amantes de la cultura alternativa", nos comenta Jeroen de Swaaf, quien quiere dejar constancia de que este proyecto artístico ha sido puesto en marcha por su hermano.

Nacido en Amsterdam y residente en Mallorca desde hace quince años, Jeroen —"Jeroni en mallorquín", dice con una sonrisa— había trabajado previamente en la isla como guía, productor de fotos de moda o cocinero, entre otros empleos, pero ahora ha optado por empezar una nueva vida en Pere Garau. Al igual que Jeroen, cada vez más isleños y también más extranjeros están descubriendo todo un abanico de posibilidades en esta secular barriada, que pese a ser tan conocida, en cierto modo está aún por descubrir y volver a brillar.
3 respuestas
Llegue en el 1974 y por Malka compañía me tuve q salir tristemente de esta bonita isla en el año 2002 . Vivía en la misma plaza pedro Garau . Pero bueno tenia mucho amigos mallorquines y tb de otros países . La visito siempre q pueda . Espero q los q lleguen de fuera si integren y respeten a los isleños q son muy muy buena gente . Adeu
en pere garau no queda ya ni un mallorquín (ni españoles)!!!
Llegué en el año 1965 entonces se llamaba el barrio de LA PALOMA y se celebraban las FIESTAS DE LA PALOMA con verbenas por la noche y juegos durante el dia en la misma plaza Pedro Garau y estaba todo muy animado con banderitas y pancartas por las calles recuerdo el comercio SALDOS VALLES porque mi madre trabajaba haciendo en su casa batas y mandiles que alguna que otra vez yo los llevaba para su venta y la fabrica de botas TONI MORA en la que trabajo un familiar en fin muchos recuerdos y un cambio total de residentes el piso familiar aun lo conservamos