Una investigación conjunta de la Policía Nacional y de la Policía Judicial de Marsella ha permitido esclarecer el asesinato de un ciudadano francés residente en Ciutadella cuyo cadáver apareció flotando el mar maniatado. Los agentes han detenido a la viuda de la víctima como presunta autora del crimen. La investigación se remonta al pasado mes de octubre cuando apareció flotando en el mar, a 150 metros de la orilla frente a las costas de Marsella, el cuerpo de J.M., ciudadano francés residente en Ciutadella. El cadáver se encontraba maniatado y con la cabeza cubierta por una bolsa de basura y sellada con cinta adhesiva. Al mismo le habían atado un ancla marina con un cabo para evitar que saliera a flote. Sin embargo, la descomposición orgánica del cadáver permitió aflorar el mismo a pesar de su anclaje e hizo posible su descubrimiento. De la investigación se hizo cargo la Brigada Criminal de la Policía Judicial de Marsella, cuya primera misión fue identificar el cadáver que se encontraba en avanzado estado de descomposición. Una vez identificado el cadáver, se descubre que se trata de un súbdito francés residente en Ciutadella. A partir de ese instante se inicia la colaboración policial y judicial por parte del G.R.E.C.O de Palma y el Grupo Local de Policía Judicial de Ciutadella, así como el Juzgado de Instrucción número dos de dicha localidad. Las primeras hipótesis barajaban la posibilidad que se tratara de un ajuste de cuentas relacionado con el crimen organizado, por las circunstancias en las que fue hallado el cadáver. Sin embargo, las gestiones practicadas por los investigadores españoles no vinculaban al ciudadano francés con el crimen organizado de Baleares. La víctima se trataba de un jubilado de la banca francesa, experto navegante, que residía en Menorca junto a su segunda esposa igualmente aficionada a los deportes náuticos. Estos datos unidos a las pesquisas realizadas por los investigadores de la policía marsellesa, apuntaban a su actual esposa como principal sospechosa del crimen. En el mes de diciembre, los investigadores españoles junto a una delegación de la policía judicial de Marsella procedieron al registro de la vivienda, así como de un velero propiedad del finado. En ambos registros se recogieron indicios y documentación relevantes para la investigación, que unido a los testimonios recogidos en Ciutadella y el resto de gestiones practicadas en Baleares, permitió a las autoridades francesas dirigir con plenas garantías la dirección de la investigación hacia la esposa del finado. Finalmente, a principios del mes de mayo, la Policía Judicial de Marsella procedió a la detención de Annie S., de 44 años y de nacionalidad francesa, reconociendo ante las autoridades ser la autora del crimen de su marido, permaneciendo en la actualidad en prisión provisional a la espera de juicio.





