Esta semana la cosa va de hospitales. Mientras nos enterábamos de que la actriz Silvia Abascal había tenido que ser intervenida de urgencia tras sufrir un ictus cerebral durante el Festival de Cine de Málaga, Catherine Zeta-Jones ingresaba en un centro de salud después de ser diagnosticada con un trastorno bipolar. A sus 32 años de edad, Silvia Abascal, que se encontraba en el Festival de Cine Español de Málaga en calidad de jurado, comenzó a sentirse mal. Pero no fue hasta finalizada la cena cuando, concretamente en el hall del hotel Málaga Palace, le sobrevinieron fuertes dolores de cabeza. Fue entonces cuando perdió el conocimiento e inmediatamente fue trasladada al hospital Calos Haya de la ciudad andaluza, donde le diagnosticaron un ictus cerebral que requería, según los médicos, una intervención de urgencia. Una semana después de la exitosa intervención y viendo que se recuperaba favorablemente, la joven fue trasladada en UVI móvil hasta el Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid, donde actualmente se encuentra reestableciéndose. De su lado no se despegan su madre y su hermano mayor que acuden cada día al centro hospitalario a ver a la actriz. Y, aunque se muestran preocupados por el estado de salud de Silvia y piden respeto para ella, el último parte médico apuntaba a que Abascal "clínicamente se encuentra bien". Además, todos sus amigos y compañeros de profesión como Maribel Verdú, Elena Anaya, Francis Lorenzo o Miriam Gallego no han dejado de mandarle mensajes de apoyo y de volcarse con la actriz. De hecho,Elena Ballesteros escribió en su perfil de Twitter: "Deciros que S.Abascalestá mucho mejor. El equipo de la ambulancia que la atendió fue muy eficiente. Gracias por su profesionalidad!!". A raíz de este comentario, miles de seguidores de Silvia se lanzaron a las redes sociales para dejar constancia de su ánimo y su apoyo a la actriz. Y hasta la artista madrileña María José Martínez Montesinos ha asegurado que su cliente agradece muchísimo el interés y respeto que se está mostrando por su enfermedad. EL CÁNCER DE MICHAEL DOUGLAS ACABÓ HUNDIENDO A SU MUJER Paralelamente a la historia de Silvia Abascal, sucedía que la ganadora del Oscar a la mejor actriz por su papel en 'Chicago' había estado ingresada en un centro de salud mental tras ser diagnosticada con un trastorno bipolar. "Tras lidiar con el estrés del pasado año, Catherine tomó la decisión de ingresar en un centro durante un breve período de tiempo para recibir tratamiento y superar su trastorno bipolar", declaró el portavoz de Zeta-Jones. Ahora, los expertos aseguran que la actriz llevaba sumida en una grave depresión desde hacía más de un año y la bipolaridad ha sido el resultado de su delicado estado anímico. "Ha sido el año más difícil de su vida. Ha estado viviendo un infierno. La presión ha sido insuperable". Y es que Catherine ha tenido que vivir "más noches en vela" de las que se puedan imaginar, preocupándose por la salud de su marido, así que le dio por beber y fumar de manera compulsiva. Además de haber sido tratada por ello, se ha sabido que sufrió una depresión maníaca producida por el estrés que ha sufrido luchando junto a su marido para vencer al cáncer. Afortunadamente ambas actrices parecen estar fuera de peligro y mientras Silvia Abascal se recupera en el Gregorio Marañón rodeada de amigos y familiares, la mujer de Michael Douglas después de recibir tratamiento durante cinco días, ya se encuentra con fuerzas y lista para volver al trabajo.





