Los vecinos de Son Ferriol están hartos. La paciencia se agota tras una nueva oleada de robos en el barrio. Este domingo lograron grabar a un presunto grupo de ladrones en pleno acto delictivo, en las inmediaciones del campo de fútbol del Ferriolense. Eran cerca de las 19:30 horas cuando varios residentes, alertados por movimientos sospechosos, salieron a la calle con el móvil en la mano para interceptar e increpar a al nuevo ladrón del barrio.
Las imágenes muestran a uno de los presuntos delincuentes intentando subir a un Mitsubishi blanco. Según confirmó posteriormente la Policía Nacional a los vecinos, era un vehículo robado. Los implicados, al verse sorprendidos, trataron de cubrirse el rostro y huyeron a la carrera, mientras eran grabados y señalados por los residentes, que les advirtieron de que ya tenían sus rostros registrados.
Tras el suceso, los vecinos revisaron los vehículos estacionados en la zona y constataron que al menos tres tenían las lunas rotas. Poco después, a través del grupo de WhatsApp vecinal, se denunció además el robo de otro coche en las inmediaciones de la calle Lleó XIII. Entre los objetos sustraídos en esta nueva ola de delitos figuran herramientas y alimentos, según relatan los afectados.
Uno de los vehículos está siendo inspeccionado por la Policía, que ha recogido pruebas en la comisaría. Al parecer, uno de los ladrones se habría cortado al romper un cristal, dejando restos de sangre que ya están siendo analizados.
INDIGNACIÓN VECINAL POR LA FALTA DE SEGURIDAD
Los residentes denunciaron esa misma noche que el presunto nuevo ladrón seguía merodeando por la zona incluso después del aviso a las autoridades. Las familias del conocido barrio de Palma critican abiertamente la falta de efectivos policiales y de recursos por parte del Ayuntamiento. Reclaman la instalación urgente de una comisaría en el barrio para frenar una situación que, aseguran, se repite con demasiada frecuencia.
“Llevamos ya seis o siete robos en lo que va de año, todos con el mismo modus operandi: buscan furgonetas de empresa o particulares para llevarse lo que haya dentro”, explica uno de los vecinos, visiblemente molesto por la inacción institucional.
La creciente inseguridad ha generado un fuerte malestar entre los residentes, que aseguran sentirse desprotegidos y exigen medidas inmediatas para frenar esta cadena de robos que tiene en vilo a Son Ferriol.