Taltavull te has equivocado. Y lo digo en latín, que es la lengua oficial de la Iglesia de Roma, a la que perteneces como Obispo. Después del papa, tú eres la Iglesia en Mallorca. Y Mallorca, como sociedad, fue árabe, judía, fenicia, romana, catalana y española. No sé a cuál de estas lenguas propias, se refiere su ilustrísimo.
Taltavull erras. La lengua de esta isla, y de la tuya, ha sido desde 1300 la lengua de la corona de Aragón, ahora mal llamada catalán. Pero así lo dispusieron los filólogos, basándose en la historiografía de nuestra lengua común. Se equivoca el prelado al afirmar que el uso del español atenta contra el uso del catalán en la vida de Mallorca. Cuando la lengua de Llull era prohibida en la península, la que se hablaba en estas islas era mantenida por la iglesia.
En las celebraciones, misas, actos litúrgicos y sociales, la iglesia, como bien sabe usted, defendió, impulsó y salvó del olvido la lengua, mal llamada vernácula o materna. En todo esto estaremos de acuerdo, pero no comparto su opinión sobre el uso del español como forma de ataque al catalán. En Mallorca, su obispado, se hablan más de 100 idiomas.
El mallorquín lo utiliza más del 45% de los residentes. En la Part Forana, el 95%, son datos oficiales. Si lo que propone es mantener algunas tradiciones ya superadas en el concilio de Tours, en el 813, cuando se decide traducir el latín a la lengua vulgar, para que los fieles entendiesen el mensaje de la Iglesia, estamos ante un hecho probado en 1960 con la llegada masiva de peninsulares a Mallorca.
La Misa se hacía en mallorquín, pero los inmigrantes no conocían la lengua, muchos, aún no la conocen, y se tuvo que imponer el castellano (así se denominaba en esos años). Si la reflexión de su eminencia intenta abrir un nuevo debate cultural entre el catalán que defiende la izquierda nacionalista y el catalanismo, frente al uso del español en la vida de la isla, está perdiendo el tiempo.
La lengua es patrimonio del pueblo, no de sus instituciones. La gente hablará como quiera y usará la lengua que quiera, cuando quiera. Sobre todo, si la lengua le permite hacer negocios, ganar dinero y mejorar su calidad de vida. Cuénteles la milonga a los jóvenes de hoy, que son bien conscientes de que con el catalán no llegarán más allá de estas tierras, y que para salir de este microcosmos deberán expresarse perfectamente en español y en inglés. Y si pueden, en otros idiomas.
Lo de la lengua atacada, lo será para una iglesia que no defiende a los que no hablan esa lengua. Lo será para una iglesia que ha pedido su razón de ser: la iglesia de los desfavorecidos, de los pobres, de los perseguidos (incluso por los catalanistas), de los que padecen injusticias, de los oprimidos y de los humildes.
Apreciado y respetado Episcopio, gracias por ilustrarnos y enseñarnos el mensaje de la Iglesia. Gracias por alumbrar el camino que los cristianos debemos seguir para llegar a Cristo. Sois el profeta, el sacerdote y el rey. Pero no olvidéis a vuestro rebaño, a todas las criaturas de todos los colores y razas. Y no os dejéis llevar por oportunismos políticos. Dejad al César lo que es del César y recordad a todos lo que es de Dios.
Apreciado Taltavull, beso el anillo del pescador. Amén.





