Comprar Can Domenge por 45 millones hubiera sido un mal negocio. Así lo ha manifestado ante la sección segunda de la Audiencia Provincial el propietario de la empresa Asescon S.L. Juan Matamalas, que se presentó al concurso de enajenación del solar dentro de la UTE liderada por Ibercon.
Matamalas participó en el proyecto de Mateo Sastre por amistad con él y para aportarle el certificado ISO que requerían las bases.
La UTE en la que participaba ofreció 45 millones por Can Domenge asegurando que consideraban viable destinar esa cantidad a los terrenos “se podía permitir aunque la repercusión hubiera sido cara”, sin embargo, y trascurridos 7 años, Matamalas ha afirmado que “tal y como han venido las cosas hemos tenido suerte de no ganar el concurso” puesto que les hubiera podido causar la “quiebra”.
