Los aeropuertos de Baleares baten récord en Viernes Santo con más de 1.000 vuelos

Los tres aeropuertos de Baleares operarán este Viernes Santo cerca de un total de 1.000 vuelos, lo que representa un incremento del 46 por ciento respecto al mismo día de 2024, cuando la Semana Santa cayó en marzo. Este fuerte repunte evidencia el auge del turismo en abril y anticipa una temporada alta más temprana de lo habitual.

Según datos de Aena, el aeropuerto de Son Sant Joan (Palma) concentrará la mayoría de los movimientos, con 738 vuelos programados, un 42,5 por ciento más que el año pasado. De ellos, 535 son internacionales (72 por ciento) y 217 nacionales (28 por ciento).

El aeropuerto de Ibiza también registrará una actividad intensa, con 203 vuelos previstos, lo que supone un aumento del 63,7 por ciento respecto a 2024. La isla blanca vivirá un equilibrio casi total entre vuelos internacionales (118) y nacionales (93).

En Menorca, están previstos 65 movimientos, un 38,3 por ciento más que el mismo día del año anterior. En este caso, 19 vuelos serán internacionales (29 por ciento) y 46 nacionales (71 por ciento).

MÁS ALLÁ DE LOS 1.000 VUELOS

Pese a estos 1.000 vuelos, entre el viernes 11 de abril y el lunes 21, Aena ha programado un total de 11.240 vuelos en Baleares con motivo de la Semana Santa, un 45,6 por ciento más que en el mismo periodo de 2024.

El aeropuerto de Palma lidera nuevamente el tráfico aéreo con 8.272 operaciones, de las cuales 5.894 serán internacionales (un 78 por ciento más que el año anterior) y 2.378 nacionales, que apenas crecen un 1,1 por ciento respecto a 2024.

En Ibiza, se han programado 2.105 vuelos (un 46,7 por ciento más). La mayoría serán internacionales (1.109, un 119 por ciento más que el año pasado) y 996 serán nacionales.

Por su parte, el aeropuerto de Menorca prevé 863 movimientos, lo que supone un aumento del 38,5 por ciento. El dato más llamativo es el fuerte crecimiento de los vuelos internacionales, con 263 programados (un 281 por ciento más que en 2024), mientras que los vuelos nacionales suben un 8 por ciento, hasta los 600.