¿Algún socialista quiere al PSOE?

En casi 147 años de historia, el PSOE ha pasado por muchas y variopintas fases. Desde sus inicios ligados al sindicalismo decimonónico, pasando por su triste papel en octubre de 1934 alzándose contra la República para hacer su revolución; su participación en el asesinato del líder de la derecha, José Calvo Sotelo, en julio de 1936; la guerra civil, con su tensión entre quienes desde sus filas abogaban por un socialismo que aceptase las reglas democráticas de una república burguesa de corte occidental frente a quienes, como Francisco Largo Caballero, solo buscaban convertir España en una dictadura satélite de la URSS; la dura posguerra y el exilio; la reorganización previa a la Transición; la llegada de Felipe González y su conversión en un partido sistémico, sostén del bipartidismo imperfecto sobre el que se asienta nuestra democracia y su parlamento desde junio de 1977. Era este último un PSOE homólogo a las formaciones socialdemócratas europeas, y ese fue el modelo que se impuso hasta 2004, con sus virtudes, defectos y altibajos, ciertamente.

Pero, en 2004, inopinadamente y con la indudable influencia de los atentados del 11M, llega al poder en nuestro país un actor al que la historia ha ido desnudando progresivamente y que se va revelando como un conspirador resentido, un aprovechado y un colaborador necesario en el blanqueamiento de sanguinarias dictaduras como la cubana, la venezolana o la iraní, todo ello, además, parece ser, mediando precio, recompensa o favor. Hemos estado regidos por el personaje más tóxico y perverso que ha dado la política española en su historia reciente. Zapatero ha sido la mano que ha mecido la cuna de la radicalización de la izquierda y la instrumentalización de su partido hacia el guerracivilismo y la división social, con el desinteresado beneplácito de un ejército de tontos útiles, lo que culminó en 2016 con el asalto al poder del partido de un tipo absolutamente plano y sin ideología de ninguna clase, narcisista hasta la náusea, sin escrúpulos, rodeado de golfos, mangantes y abusadores como es, naturalmente, Pedro Sánchez.

Como que la política fundada exclusivamente en la mentira tiene siempre los días contados, asistimos ahora a la descomposición de este cuerpo putrefacto en que se ha convertido el partido que tuvo como lema en su centenario el de “100 años de honradez”.

Ahora bien, España no puede permitirse que la izquierda, merced a una posible desaparición o vuelta a la irrelevancia del PSOE, caiga en manos de formaciones aún más radicales y trasnochadas como Sumar o Podemos y otras de su cuerda. De manera que es de interés nacional que el partido socialista, más pronto que tarde, experimente la merecida purga a que le ha conducido esta grave indigestión de toxinas ideológicas y autocráticas y recupere la centralidad política.

Y tiene que haber -de hecho, me consta que los hay- socialistas, hombres y mujeres, que aunque sea solo por su estima a las siglas por las que han trabajado durante años, comiencen de una vez a manifestarse contra esta abyecta forma de hacer política, exijan y fuercen la remoción de sus actuales dirigentes y renuncien a fomentar esta enfermiza división entre los ciudadanos, que a nada bueno puede conducirnos.

Han sido algunas mujeres las últimas en reaccionar, y no por un posicionamiento político de su partido, sino, tras la aparición de los primeros casos, como reacción de repulsa hacia el regimiento de babosos y acosadores que, parapetados tras ese lema tan fácil como huero de “soy feminista porque soy socialista” y silenciados por el entorno de Sanchéz, se han creído con el derecho a tratar a sus compañeras y a las mujeres en general como mercancía sexual. Por cierto, algo nada extraño en regímenes del socialismo real, en los que la propaganda ensalzaba la igualdad de la mujer mientras la dirigencia la seguía tratando en privado como un ser inferior y dependiente.

Es ya hora de que los miles de electores, simpatizantes y militantes socialistas honestos abran la boca y actúen. De ello depende ahora mismo la supervivencia de su partido.

Suscríbase aquí gratis a nuestro boletín diario. Síganos en X, Facebook, Instagram y TikTok.
Toda la actualidad de Mallorca en mallorcadiario.com.

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Más Noticias