La Asociación de Alquiler Turístico de Baleares (Aptur) ha solicitado que las plazas que se arrienden a turistas en la modalidad de 60 días máximo en vivienda habitual en núcleos saturados no computen para el cálculo del techo de plazas vacacionales.
"El Govern admite esta posibilidad como incentivo a la economía colaborativa", subraya Aptur en un comunicado en el que incide en su crítica general a las restricciones al alquiler turístico, aunque también destaca que "el hecho de que la aprobación definitiva se produzca antes de empezar la temporada alta, permitirá a algunos solicitar plazas y no perderán totalmente la próxima temporada".
A raíz de que el Consell de Mallorca planteara el pasado viernes su propuesta de zonificación, el presidente de la asociación, Joan Miralles, asegura que la propuesta "condena al empobrecimiento en las zonas declaradas como saturadas".
"Algunos de estos núcleos, como por ejemplo Pollença, Alcúdia, Santanyí, Ses Salines o Sóller, han sido destinos hasta ahora de calidad y esta zonificación provocará el empobrecimiento económico de la zona, ya que se verá afectada también la oferta complementaria (comercio y restauración principalmente), además de un decrecimiento real de las plazas ya existentes", resalta Miralles.
"Estos municipios -incide- son de alta demanda turístico-residencial, por lo que es de esperar que las viviendas que no se puedan regularizar acaben en manos del turismo residencial, descapitalizando la clase media mallorquina".
