La investigación de los agentes del Grupo de Policía Judicial de la Comisaria de Playa de Palma comenzó en noviembre, tras varias denuncias por hurtos cometidos siempre por dos hombres que actuaban conjuntamente en los establecimientos afectados, ha informado la Jefatura Superior de Baleares en un comunicado.
Los delitos habían causado alarma y preocupación en las farmacias de la zona porque iban en aumento.
Los ladrones entraban y se dirigían a la sección de parafarmacia y sustraían al descuido productos de aseo, colonias y otros efectos.
Entre los distintos robos, se habían llevado productos por unos 1.000 euros de valor.
En uno de los robos, uno de ellos fue sorprendido hurtando por un cliente. El ladrón se pasó entonces el dedo por debajo del cuello como amenaza al testigo por si daba aviso a los dependientes.
Los agentes lograron identificar a los dos ladrones, establecieron un dispositivo para localizarlos y los detuvieron esta semana







