En un comunicado hecho público, la Asociación Barri Civic de Santa Catalina destaca que "lo que ocurre en Santa Catalina y es Jonquet, especialmente los fines de semana, no es ocio, es salvajismo puro y duro. Los residentes en Santa Catalina y Es Jonquet llevamos años sufriendo el ruido insoportable y el vandalismo que provocan aglomeraciones de gente que grita y arrasa con todo al ir de bar en bar en una zona saturada de locales de ocio".
La asociación añade que "el panorama que nos encontramos los vecinos, especialmente los sábados y los domingos por la mañana, al salir a la calle es desolador: aceras, calles y portales llenos de basura, vasos, botellas, vómitos, colillas, orines, entre otras lindezas. Es el resultado de los excesos y el incivismo de un público salvaje que no respeta absolutamente nada cuando viene a dirvertirse a los bares y discotecas de la zona".
Los vecinos recuerdan que "desde la asociación de vecinos Barri Cívic de Santa Catalina llevamos años denunciando la situación, reivindicando nuestros derechos como ciudadanos. Reivindicamos un barrio para vivir dónde se respeten las normas básicas de convivencia, pero a pesar de nuestros esfuerzos todavía no hemos conseguido que la situación mejore, más bien sucede lo contrario, puntos especialmente conflictivos como plaça Vapor, la calle Sant Magí, Montseñor Palmer y alrededores se están consolidando como zonas sin ley. Durante la noche puede verse ahí cualquier cosa, desde sexo en la calle, gente orinando, defecando, consumiendo droga, rompiendo mobiliario público, cualquier cosa con total desvergüenza e impunidad".
Además, subraya que "cierto que la administración en los últimos meses ha mostrado más interés en el control de la zona, pero los resultados no se perciben. El problema lo ocasionan la masificación de locales de ocio y los horarios totalmente incompatibles con un barrio residencial, además de una falta de cumplimiento en muchos casos de las ordenanzas, especialmente en cuanto a ocupaciones de la vía pública y desarrollo de actividades distintas a las autorizadas según licencia de actividad".
Ante esta situación, la asociación advierte que "la situación de convivencia es tan grave y afecta de tal manera a la Salud Pública que no podemos hacer otra cosa que pedir decencia a los responsable municipales y que actúen de una vez atajando el problema desde la raíz, cerrando las discotecas tanto legales como las ilegales de Santa Catalina y es Jonquet, y establecer unos horarios de los establecimientos de ocio que no sobrepasen la media noche. Hoy por hoy la situación es insostenible".
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