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José Manuel Barquero

Por qué el PP no debe condenar hoy el franquismo

Porque ya lo hizo. Por una cuestión de economía del lenguaje podríamos finalizar aquí la columna. Yo no debería teclear más y el PP no debería repetirse sobre lo que tiene firmado y no se ha desdicho. Fue el 20 de noviembre de 2002. La fecha ya indica que no

Un lifting sangriento

La tecnología hoy es capaz de proporcionar multitud de datos que ayudan a gestionar el riesgo en la montaña. Yo llevo en la muñeca uno de esos artilugios que te llegan a avisar de una posible tormenta cuando se produce un cambio brusco en la presión atmosférica. Algo falló hace

Ahora mano dura

El discurso identitario ha calado hondo en el debate público. Ha penetrado de una manera silenciosa pero potente, con tanta fuerza que nos permite hacer el ridículo sin darnos cuenta. Aquí nadie se ruboriza cuando los hechos y los números demuestran lo que todos sabemos, o sea, que en todas

Memoria frente a hormigón

Está de rodillas frente a un bulto cubierto por una manta gruesa. La mujer lleva las manos en los bolsillos de un abrigo viejo y mira hacia abajo con resignación, sin atisbo de rabia. Debajo de la manta yace el cadáver tiroteado de su marido, el general de la Guardia

El empujón final

Vivimos en una sociedad que trata de evitar todo estado doloroso. Por supuesto en el plano físico, donde los cuidados paliativos han experimentado un desarrollo tan extraordinario en las últimas décadas que en muchos casos han convertido el padecimiento corporal en una opción. Esto constituye un gran avance de la

La queja del defensa central

Los aficionados al fútbol vacunados con Astrazeneca -lo digo por la edad- recordarán a Goyo Benito, un central de Real Madrid no especialmente habilidoso con el balón en los pies pero contundente como ningún otro en labores defensivas. Esta es la manera elegante de explicarlo. En realidad Benito era temido

El otro

El otro día decía Sergio del Molino en una entrevista en El Mundo que “vivimos en una sociedad que confunde a quien habla en el púlpito con quien tiene la autoridad”. De ahí la virulencia de los comentarios que se leen en las redes, o en los propios medios digitales,

El sherpa kamikaze

Una vez me quedé colgado bajando una montaña a seis mil metros de altitud. Fue en una pared de nieve y hielo. Calculamos mal la longitud del rápel de descenso y me faltaron tres metros de cuerda para alcanzar la repisa prevista para detenerme. Entonces tomé la primera decisión errónea.

La sumisión de las masas

Esta semana hemos contemplado asombrados una masa humana en movimiento. Eran adultos, jóvenes y niños lanzados como proyectiles contra una frontera marítimo-terrestre. Solo han faltado bebés catapultados por los aires sobre las vallas de Ceuta y Melilla, pero mejor no demos ideas al reyezuelo del sur para el próximo chantaje.

Imperfectos

¿Existe el hombre perfecto? ¿Concebimos al menos la idea? Si pensamos en un canon estético encontraremos respuestas en el arte. El ideal de belleza ha sido representado durante siglos de múltiples formas. Si hablamos de escultura, por ejemplo, sufriremos para elegir entre las obras maestras de Bernini, Cánova o Giambologna.

El espíritu de las cosas en común

Andan los jóvenes hojeando más que nunca el BOE, atentos a que les abran la puerta de toriles para salir en tromba a la plaza. Se les ha hecho especialmente largo este estado de alarma, con su toque de queda y sus condones caducados de tanto Tynder no consumado. De

Seguir volando

Eran un par de hermanos revoltosos peleando por un juguete. Su padres se desentendían hasta que los decibelios de la discusión infantil superaban lo admisible, y entonces les regañaban dulcemente en francés. Detrás de ellos esperaban una pareja de alemanes de edad madura, que sonreían a los pequeños sin importarles