Pollença. Recinto que junto a los castillos de Alaró y Santueri constituye una de las tres fortalezas roqueras de Mallorca. Enclavado en un espolón rocoso que se yergue a 492 metros de altitud, servía para vigilar la costa, y al estar rodeado de acantilados los posibles atacantes tenían que desembarcar a cierta distancia, haciéndoles más vulnerables. Utilizado como recinto militar durante la época romana, los musulmanes resistieron dos años en esta zona, después de la conquista de Jaume I. En razón de su importancia estratégica, el monarca se lo reservó para él, y de ahí le viene el nombre. Se encuentra en la finca de Ternelles, que permanece cerrada a visitantes y excursionistas. Restaurado en época reciente, sólo conserva algunos muros y pobres indicios de lo que fueron sus estancias.





