La Policía Nacional ha detenido a 61 personas en el marco de una macrooperación contra la posesión, producción y distribución de material de pornografía infantil. La operación, bautizada como ‘Tridente’, se ha desarrollado a lo largo de varias semanas en casi todas las provincias del país, con más de 100 registros domiciliarios y la participación de más de 200 agentes especializados.
UNA MACRORED ORGANIZADA
La investigación ha destapado una red de usuarios con distintos perfiles sociales y profesionales. Entre los arrestados figuran un ingeniero informático, un exmilitar profesional y un profesor de secundaria que tenía menores en acogida. Los agentes han intervenido más de 1.600 dispositivos de almacenamiento, entre ellos 63 ordenadores, 229 discos duros y 58 memorias USB, todos con archivos de contenido pedófilo.
La operación ha tenido un marcado carácter técnico y complejo. En uno de los casos más llamativos, los agentes localizaron a un detenido en Ourense que utilizaba la red wifi pública de un local de hostelería para conectarse en franjas horarias concretas y descargar material ilegal. En otro punto del país, en Castellón, un ingeniero informático había diseñado una instalación por cable para compartir la conexión de internet con su hermano -residente en el piso superior- desde donde ambos descargaban y distribuían archivos de explotación sexual infantil.
Uno de los casos más graves se localizó en Las Palmas, donde los agentes detuvieron a un profesor de educación secundaria que grababa a menores -bajo su tutela- mientras estaban desnudos o practicaban conductas sexuales. Otro arrestado en Madrid, un exmilitar profesional, almacenaba pornografía infantil en su domicilio, donde además la Policía halló nueve armas de fuego, incluidas armas de guerra, y gran cantidad de munición.
INVESTIGACIÓN ABIERTA
Los 61 detenidos forman parte de un grupo más amplio de 110 personas investigadas. La operación sigue abierta y coordinada por la Unidad Central de Ciberdelincuencia, en colaboración con la Fiscalía Especial de Criminalidad Informática y varias autoridades judiciales.
La Policía Nacional insiste en la importancia de no compartir, almacenar ni reenviar este tipo de contenidos. Recuerda que este comportamiento constituye un delito penal, y habilita el correo electrónico denuncias.pornografia.infantil@policia.es para que cualquier ciudadano pueda alertar de forma confidencial y anónima sobre la difusión de pornografía infantil.
