Perdonen que compare la acción de una supuesta especie de “hannibal lecter”, que se ha dado en el mundial, con las ganas de morder al juez, que le tiene el Fiscal, en el caso que “noss”ocupa estos días. Creo que habrá sido una especie de infección draculiana, la que aqueja, padece y sufre el otrora admirado Fiscal anticorrupción señor Horrach. O,como digo, una posible transgresión infecciosa, un simple contagio del mundialista uruguayo, al que le dio por morder, probar la carne hincando directamente el diente sobre el hombro del italiano Chiellini, como si sorbiera un bocado de spaghetti o un trozo de lasaña al pesto... Es como un arrebato de impotencia; “si no puedo así lo haré asà ñam ñam”, como un zombi futbolero. El otro, como un defensor Fiscal justiciero. Dicen que no es la primera vez que al hambriento uruguayo le da por mordisquear la cosa. El pasado año, en la liga Inglesa, el futbolista quiso probar carne rusa y mordió en el brazo a Branislav Ivanovic. Lo nunca visto oigan. Miren si al Luizito del Uruguay, le da por morder al Juez de competición o darle el mordisco en las mismas criadillas, seguramente que le sentaría -al árbitro-como una patada. Perdonen que establezca una comparación entre la mordedura del jugador de fútbol y las ganas que le tiene el Fiscal del caso Noós, de incarle el diente al Juez Instructor de dicho caso el señor Castro. Reconocerán no obstante, que existe cierta similitud. Cada uno en su terreno, están que muerden. Uno ya han mordido y el Fiscal està que muerde. Y no es para menos. Horrach ya tenía asegurada la no comparecencia de la Duquesa y ete aquí, que sale su campechano amigo i compañero de investigaciones anti corruptivas, el juez Castro, y, se dispone a poner broche final al caso Noós, pero con la imputación de la Infanta y todo el elenco de primeros actores, figurantes incluidos !Toma, la Infanta también imputada!. Vaya putada -con perdón- gritaría el Señor Horrach-. Eso no lo consiento, que metas en el mismo saco a mi defendida, hasta aquí podíamos llegar Juez Castro, que me querello leñe, que eres un prevaricador ! El Juez, aguanta mecha y a la vuelta le responde a Horrach: que me denuncie, que se querelle si así lo considera el Señor Horrach. Mientras, la mayoría de contribuyentes que acabamos de depositar nuestros detritus en Hacienda, aplaudimos la decisión del Juez. Suponemos, que lo de Castro, no es un farol, su decisión está bien fundamentada y pone en su sitio -en el banquillo- a la que puede saber más de lo que no dice y puede que disponga de cartas que nadie conoce, y, qué carajo, pues venga, queremos verlas y despejar incógnitas. Cartas boca arriba y que sea lo que Dios quiera. Finalizo: Al uruguayo que muerde en los terrenos de juego, la Fifa, -otra que tal-, lo mandó a su casa y le ha dejado en penitencia riguroso ayuno y abstinencia por varios meses. La “Fiscalia”, que no es la Fifa, pero también dicta, se supone que sigue ordenando desde Madrid, al Fiscal Horrach, que muerda al Juez y si es necesario que le pite penaltis. El Juez por su parte, sabedor de que está en su último partido, ha metido toda la carne y su honra personal y profesional en el asador. ¿Se lo comerán...al Juez?
