El grupo ecologista GOB ha puesto en duda el Plan General de Puertos porque decaerá en una "intensificación del tráfico de barcos" en las zonas portuarias de Baleares. Las medidas que "más incidirán en la masificación" son las de reordenación de los puertos con tal de aumentar el número de plazas, esloras y la potenciación del chárter, según especifican.
De esta forma, han transmitido a la Comisión Balear de Medio Ambiente que se desplazará al "navegante local" pues "los amarres se gestionan desde la perspectiva de la rentabilidad de su uso mercantilizado, y por tanto, favoreciendo empresas que muevan las embarcaciones" frente a particulares "que necesitan también un amarre".
El GOB también ha valorado de forma positiva otros aspectos del Plan como que descarte ampliar los puertos. Aunque alertan que la tendencia es "ampliar al máximo los rendimientos no sólo logísticos y de gestión portuaria, sino también comerciales y lúdicos de los puertos".
La propuesta actual, según ha explicado el GOB, supondrá la puesta en marcha de 3.800 amarres, con tal dar respuesta a los 5.000 solicitantes. De esta forma se llegarán a las 27.000 plazas. En este sentido, indican que la problemática no reside en los amarres, sino en las esloras.
"Reduciendo las esloras no habría esta lista de espera porque la mayoría de embarcaciones locales son de pequeña eslora. Con esloras más pequeñas no hay chárter ni grandes yates y se liberan muchos amarres", señala el Grup Balear d'Ornitologia i Defensa de la Naturalesa.
El GOB ha querido resaltar el proyecto que se desea realizar en Puerto Portals (Calvià). El grupo critica duramente que se prevean obras para hacer "un restaurante sobre el espigón que da a la playa del Oratori", una zona comercial, un aparcamiento subterráneo, oficinas y un gimnasio. Además de varios comercios. Por ello, censuran "la obsesión de hacer negocio en el espacio portuario común y sobre terreno ganado al mar no tiene límite". Reclaman un Plan que garantice "una vocación extrictamente portuaria y de transito"
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