“Cuando un tenista está parado durante meses es porque ha dado positivo. No siempre es así, pero muy a menudo”. Estas son las palabras que pronuncio la exministra francesa del gobierno Sarkozy, Roselyn Bachelot en el transcurso del programa Le Grand 8 del canal D8 de la televisión gala. Fue en el mes de marzo de este mismo año. El 25 de abril Rafa Nadal anunciaba, en defensa de su honor e imagen, la interposición de una querella contra la denunciante ante los tribunales de justicia parisinos.
La reacción y la negativa tardaron poco, pero el caso cobra una nueva dimensión después de que “hackers” rusos hayan demostrado que el mallorquín tomó sustancias prohibidas que figuran en el Anexo I del Convenio Antidopaje Internacional, eso si, con permiso de acuerdo con la normativa establecida en el mismo y suscrita por más de cien países, entre ellos España.
La normativa al efecto prevé que, en efecto, los deportistas puedan ser autorizados circunstancialmente y con fines terapéuticos al consumo de fármacos incluidos en el anexo II del reglamento de aplicación, siempre que sigan los protocolos establecidos y que, sin género de duda, aplicaron los médicos que atendían a Rafa en las dos ocasiones en que lo precisó, 2009 y 2012, pero no cabe la menor duda de que la parte acusadora y, a la vez, demandada por difamación, habrá encontrado una inesperada alianza en los documentos publicados y, sobre todo, después de que el de Manacor haya reconocido su ingesta aunque sea desde la pertinente autorización de los organismos competentes.
Es decir, puede que la señora Bachelot no se explicara con toda la verdad, pero tampoco mintió del todo o, en todo caso, los jueces tendrán que precisar que el tenista no paró por un control positivo, sino que lo hizo por una lesión o lesiones a partir de las cuales ingirió el medicamento cuestionado.
Sea como sea, una grave acusación de resonancia internacional se reduce ahora a una cuestión que va muy poco más allá de la semántica o del tiempo. Traducido al castellano ¿qué fue antes el huevo o la gallina?. En mi humilde opinión caso cerrado, al menos en los Juzgados.
