¿Qué imagen cree que deja en la historia reciente de la Iglesia el papado de Francisco? ¿Cree que puede ser considerado un papa reformista?
— Sí, yo creo que ha sido un reformista, pero no en el sentido de la doctrina, que no la ha tocado. Entre otras cosas porque creo que ha tenido miedo a que hubiese un cisma en la Iglesia. La oposición que ha tenido Francisco desde el primer día de ser nombrado papa ha sido inimaginable para la gente de la calle. Es algo que a mí me escandaliza terriblemente. Este papa, a pesar de eso, no ha hecho reformas doctrinales y lo que ha marcado son, vamos a llamar, iniciativas que son tendencias, que no se han consolidado tampoco. Ha marcado un nuevo estilo, pero yo creo que no ha podido hacer más. Ha puesto claramente a Cristo y al Evangelio en el centro de la Iglesia y de la vida de los cristianos.
"La oposición que ha tenido Francisco desde el primer día de ser nombrado papa ha sido inimaginable"
Nadie podrá negar que Francisco fue un papa cercano e incómodo para muchos…
— Bueno, es que Francisco era un anticlerical radical. Tuvo el coraje de pronunciar un discurso con las catorce enfermedades espirituales de la Curia Romana. No te puedes imaginar lo que les soltó. Yo también pienso que la mayor parte de los males de la Iglesia tienen mucho que ver con el clericalismo. La Iglesia tiene que hacer reformas precisamente en la doctrina. Este hombre ha tenido miedos.
"Francisco era un anticlerical radical"
¿Usted no diría que Francisco logró cambiar el rumbo de la Iglesia o simplemente intentó abrir grietas en el sistema?
— La Iglesia de 2025 que deja Francisco no es sustancialmente diferente de la que cogió. Es un hombre que ha marcado estilos, no es un formalista en el sentido antiguo. Este papa lo ha roto todo.

Francisco hablaba de la necesidad de que los pastores tengan olor a oveja… ¿Cómo se tradujo eso en hechos concretos?
— Ese es su estilo de vida. Francisco ha ido a las cárceles, siempre acoge a los pobres, toda su política con los emigrantes, él ha sido un emigrante. Se refería al pastor que no se lo cree, que realmente olvida lo que es el poder y que es jerarquía, lo cambia porque es servicio, pero eso se demuestra día a día, no como pasa aquí la mayoría de las veces, porque dicen una cosa y hacen la contraria.
Hablemos un poco de los abusos sexuales en el seno de la Iglesia. Francisco dio un giro radical a ese grandísimo problema...
— Benedicto fue uno de los grandes culpables. Yo creo que renunció porque estaba implicado alguien muy cercano a él. Francisco ha conseguido limpiar la iglesia de los abusos sexuales, en el sentido que antes reaccionaron tapando y encubriendo. Eso, desde Pio XII hasta Francisco lo han hecho todos los papás. Quisieron tapar para salvaguardar el prestigio de la institución, pero la institución nunca debe estar por encima de las personas, y lo que no puedes hacer a un pederasta es darle una nueva oportunidad para que siga haciéndolo, mandándolo a otro sitio.
"La institución nunca debe estar por encima de las personas, y lo que no puedes hacer a un tío pederasta es darle una nueva oportunidad para que siga haciéndolo"
¿Qué me dice del papel de la mujer en la Iglesia?
— Este es otro tema del cual yo me siento muy avergonzado. Y esto, una vez más, se debe a Juan Pablo II y Benedicto XVI. Fueron grandes comunicadores, sobre todo Juan Pablo II, pero que pusieron todo su empeño en controlar y neutralizar el espíritu reformista del Concilio Vaticano II. Por eso, Francisco lanzó dos grandes mensajes: hay que volver al Vaticano II y aplicarlo; y hay que poner el centro de la Iglesia en Jesús y, por tanto, en el Evangelio. Los dos papas anteriores utilizaron el magisterio para defender verdades que no lo son. ¿Dónde está en el Evangelio que las mujeres no son iguales a los hombres? Lo ha utilizado San Juan Pablo II y, para remachar dos veces, Benedicto XVI. Ahora es dogma de fe. Intocable. Y el Francisco ha dicho: yo no puedo tocar el magisterio. Sí, ha repartido juego a las mujeres. Les ha dado dos dicasterios. La economía, el banco vaticano la lleva una mujer y otros dos... Bueno, me parece muy bien. Yo no me opongo a eso. Creo que no ha podido hacer otra cosa. Es profundamente decepcionante.
"Los dos papas anteriores utilizaron el magisterio para defender verdades que no lo son"
¿Por qué le ha costado tanto al papa avanzar en cuestiones como que la mujer acceda al diaconado?
— Harían falta ocho Franciscos seguidos para empezar a cambiar cosas en la Iglesia. Esto no puede ser. El magisterio es una cosa muy seria. Todos sabemos cuál ha sido la postura de la Iglesia frente a la mujer, por su postura en el sexo y tal. Una estupidez como un templo. Bueno, pues si quieren seguir así, perderán a las mujeres.

¿Es posible que el sucesor de Francisco retome esta agenda de apertura o cree que se producirán retrocesos?
— No sé lo que pasará. La Iglesia está en una encrucijada. Si no viene un papa continuista, que tendrá sus matices, pero que entienda que el Evangelio es lo central, con todo lo que eso conlleva eso, y que hay que seguir todas las reformas que ha insinuado Francisco, la Iglesia acabará perdiendo, y siendo lo que ya ha profetizado Benedicto XVI, que de tonto no tenía un pelo: que la Iglesia o el catolicismo sería una minoría muy minoritaria.
"Si no viene un papa continuista, que entienda que el Evangelio es lo central, la Iglesia acabará perdiendo"
Hablemos del rechazo que sufrió Francisco por los sectores más ultraconservadores. ¿Por qué este odio africano a un papa, al que acusan de rojo?
— Este ha sido un papa conservador. Padeció por eso, incluso fue castigado enviándolo a la provincia argentina de Córdoba; y luego a Chile. Era un hombre duro y conservador. Francisco no era marxista ni comunista, pero sí era peronista. Pero es que desde los años 40 o 50, toda la Iglesia argentina era peronista. Concebía el mundo desde el punto de vista del populismo peronista. Pero hizo un cambio radical desde que fue cardenal. Se levantaba a las 6 o a las 7 de la mañana, rezaba, decía misa, cogía su cartera con sus zapatos negros, se montaba en el autobús y se iba a las villas miseria. En su vida personal hizo una transformación espiritual que no era imaginable antes. Yo esto también se lo reconocería.
"Francisco no era marxista ni comunista, pero sí era peronista"
La sede vacante por la muerte de Francisco va a retasar el relevo del obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull…
— Yo he escrito tres artículos sobre esto en mallorcadiario.com. Dije que parece ser que en este momento ya no le iban a prorrogar y que deseaba que no se les ocurriese poner al que patrocina él. Además, cuando lo mandaron aquí, lo mandaron castigado. Él quería ir a Calahorra y después aspiró a Valencia. Tampoco lo ha conseguido.