El candidato de los partidos de izquierda para dirigir la Oficina Anticorrupción de Baleares, Jaume Far, no ha obtenido en primera votación los apoyos necesarios para ser designado para el cargo. Según establece la ley de creación de este nuevo organismo de prevención y persecución de la corrupción, el director deberá ser designado por el pleno del Parlament con tres quintos de los votos y hoy Far ha sumado 31 de los 55 votos válidos, 2 menos de los que necesitaba en primera ronda.
La siguiente votación, en la que bastará la mayoría absoluta para elegir al director de la Oficina Anticorrupción, tendrá que celebrarse en un próximo pleno del Parlament no antes de 15 días hábiles, por lo que, como mínimo, se planteará a partir del 19 de diciembre, cuando está previsto que comience el pleno de aprobación definitiva de los presupuestos de 2018.
La candidatura de Far ha sido plateada por PSIB, Podemos, MÉS per Mallorca, MÉS per Menorca y la diputada por Formentera Silvia Tur, mientras que el resto de diputados han votado en contra o nulo (2).
El candidato, que previsiblemente empezará a ejercer el cargo a principios del próximo año, es inspector de Hacienda y actualmente dirige la oficina tributaria de Calvià.
El máximo responsable de la Oficina Anticorrupción cobrará 95.000 euros, el sueldo público más alto de la administración autonómica
